Ahora que se habla tanto de ecología me gustaría que muchos de los que se dicen ecologistas volvieran la vista al pasado. De esta forma podrían comprobar hasta que punto, hasta no hace muchos años, se podía vivir de una forma más natural que la actual simplemente por el hecho de estar en contacto con la naturaleza y ser más austeros.
Se podría hacer un catálogo de recetas ecológicas y a partir de este catálogo establecer cuales de estas medidas podríamos aplicar en nuestra vida diaria. ¿No lo sé? Sería cuestión de planteárselo, pero no creo a que muchos les gustara el volver a vivir de la misma forma que lo hacían sus padres y sus abuelos. Además me pregunto: ¿la sociedad está preparada para el supuesto de tener que volver a vivir bajo el estigma de la austeridad? Yo creo que no. Pero de todas formas hagamos un repaso y podrán comprobar hasta que punto despilfarramos y gastamos diariamente determinadas cantidades de dinero que podríamos dedicar a otros menesteres más útiles y productivos para la sociedad y para nosotros mismos. Para ello nos vamos a ir a las fuentes del ecologismo puro y duro. Permítanme que ponga como ejemplo los años 60 del siglo XX y un lugar: Pinarejo, nuestro pueblo.
Recetario:
-En nuestro pueblo había una centralita de teléfono y cuando se tenía necesidad de comunicar con algún familiar se acudía a la centralita para concertar la llamada.
-En nuestro pueblo no había prácticamente coches y cuando alguien tenía que viajar hacia uso del taxi de Antonio.
-En nuestro pueblo se daba como forma ecología de reponer el terreno el barbecho.
-En nuestro pueblo era normal procurarse como alimento base la carne de los animales que se criaban en laS casas.
-En nuestro pueblo como no había servicios públicos no había impuestos.
-En nuestro pueblo los restos orgánicos, basura, se depositaba en el corral y servía para alimentar a los animales
-En nuestro pueblo se calentaba el agua para el aseo de las personas en calderetas de estaño que se ponían a calentar en los patios de las casas bajo el sol del mediodía.
-En nuestro pueblo muchas de las prendas de vestir las confeccionabas las mujeres en casa.
-En nuestro pueblo se veía la televisión en el casino y la luz que se gastaba en las casas era la imprescindible y necesaria para no tener que ir a tientas.
-En nuestro pueblo todos vivían de su trabajo, poco o mucho, y no de las ayudas del estado, ya que no existían.
-En nuestro pueblo la base de la alimentación era tan escasa que se desconocía la obesidad, la gota, el ácido úrico, el colesterol etc.
-En nuestro pueblo muchos de los alimentos se preparaban en los rescoldos, brasas, de la chimenea.
-En nuestro pueblo todas las casa tenían aljibes de los que se extraía el agua para el uso diario de las casas.
-En nuestro pueblo no había agua en las casas y ésta se acarreaba de los pozos del común.
-En nuestro pueblo la luz que se usaba en las casas era de baja calidad y escasa.
-En nuestro pueblo para la calefacción de las casas se usaba las estufas y como materia prima la paja y los restos de las podas y marañas de los terrenos. incultivables.
-En nuestro pueblo se usaba el membrillo y elespliego como ambientar de las casas y de los armarios.
-En nuestro pueblo se usaba la albahaca y la lavanda para espantar a las moscas, mosquitos y otro tipo de insectos.
-En nuestro pueblo el champú y el jabón eran caseros. Recuerdan el vinagre y la yema de huevo, cahampú casero, y aquellos masajes que nuestras madres nos daban en el cuero cabelludo.
-En nuestro pueblo el aseo, retrete, ya se sabe donde estaba.
-En nuestro pueblo las cortinas de entrada a las casas las confeccionaban las mujeres con chapitas de botellas de vidrio. Cosa ésta que ahora está de moda.
-En nuestro pueblo.............en nuestro pueblo......etc
Podríamos continuar el catálogo hasta el infinito pero la pregunta es: ¿Estamos dispuestos a este sacrificio?. Yo de verdad que me quedo con aquel refrán que decía: Más vale el diablo por viejo que por diablo.
Se podría hacer un catálogo de recetas ecológicas y a partir de este catálogo establecer cuales de estas medidas podríamos aplicar en nuestra vida diaria. ¿No lo sé? Sería cuestión de planteárselo, pero no creo a que muchos les gustara el volver a vivir de la misma forma que lo hacían sus padres y sus abuelos. Además me pregunto: ¿la sociedad está preparada para el supuesto de tener que volver a vivir bajo el estigma de la austeridad? Yo creo que no. Pero de todas formas hagamos un repaso y podrán comprobar hasta que punto despilfarramos y gastamos diariamente determinadas cantidades de dinero que podríamos dedicar a otros menesteres más útiles y productivos para la sociedad y para nosotros mismos. Para ello nos vamos a ir a las fuentes del ecologismo puro y duro. Permítanme que ponga como ejemplo los años 60 del siglo XX y un lugar: Pinarejo, nuestro pueblo.
Recetario:
-En nuestro pueblo había una centralita de teléfono y cuando se tenía necesidad de comunicar con algún familiar se acudía a la centralita para concertar la llamada.
-En nuestro pueblo no había prácticamente coches y cuando alguien tenía que viajar hacia uso del taxi de Antonio.
-En nuestro pueblo se daba como forma ecología de reponer el terreno el barbecho.
-En nuestro pueblo era normal procurarse como alimento base la carne de los animales que se criaban en laS casas.
-En nuestro pueblo como no había servicios públicos no había impuestos.
-En nuestro pueblo los restos orgánicos, basura, se depositaba en el corral y servía para alimentar a los animales
-En nuestro pueblo se calentaba el agua para el aseo de las personas en calderetas de estaño que se ponían a calentar en los patios de las casas bajo el sol del mediodía.
-En nuestro pueblo muchas de las prendas de vestir las confeccionabas las mujeres en casa.
-En nuestro pueblo se veía la televisión en el casino y la luz que se gastaba en las casas era la imprescindible y necesaria para no tener que ir a tientas.
-En nuestro pueblo todos vivían de su trabajo, poco o mucho, y no de las ayudas del estado, ya que no existían.
-En nuestro pueblo la base de la alimentación era tan escasa que se desconocía la obesidad, la gota, el ácido úrico, el colesterol etc.
-En nuestro pueblo muchos de los alimentos se preparaban en los rescoldos, brasas, de la chimenea.
-En nuestro pueblo todas las casa tenían aljibes de los que se extraía el agua para el uso diario de las casas.
-En nuestro pueblo no había agua en las casas y ésta se acarreaba de los pozos del común.
-En nuestro pueblo la luz que se usaba en las casas era de baja calidad y escasa.
-En nuestro pueblo para la calefacción de las casas se usaba las estufas y como materia prima la paja y los restos de las podas y marañas de los terrenos. incultivables.
-En nuestro pueblo se usaba el membrillo y elespliego como ambientar de las casas y de los armarios.
-En nuestro pueblo se usaba la albahaca y la lavanda para espantar a las moscas, mosquitos y otro tipo de insectos.
-En nuestro pueblo el champú y el jabón eran caseros. Recuerdan el vinagre y la yema de huevo, cahampú casero, y aquellos masajes que nuestras madres nos daban en el cuero cabelludo.
-En nuestro pueblo el aseo, retrete, ya se sabe donde estaba.
-En nuestro pueblo las cortinas de entrada a las casas las confeccionaban las mujeres con chapitas de botellas de vidrio. Cosa ésta que ahora está de moda.
-En nuestro pueblo.............en nuestro pueblo......etc
Podríamos continuar el catálogo hasta el infinito pero la pregunta es: ¿Estamos dispuestos a este sacrificio?. Yo de verdad que me quedo con aquel refrán que decía: Más vale el diablo por viejo que por diablo.
José Vte. Navarro Rubio
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