viernes, 17 de junio de 2011

RELATO FICTICIO: LA RECOLECTORA DE COLLEJAS

1er. Comentario:

Estimada amiga María creo recordarte cogiendo collejas allí en el camino que iba a la Hoz y desde siempre me impresiono tu fortaleza. Llegabas al pueblo con el mandil lleno de esas suculentas hojas, casi tréboles, que luego supongo cocinarías en casa. Que tiempos aquellos en que el ganado transitaba por las calles de Pinarejo y la gente salía a la puerta de la calle para ver como el pastor guiaba a los ovinos con el fin de que siguieran su camino y no entraran en ningún portal para comerse aquellas cortinas hechas con chapitas de refrescos que también servían para que las moscas no entraran en las partes nobles de la casa ni en las despensas de la cocina para cagarse en los adobados jamones, chorizos y morcillas.

Pero María aquellos tiempos ya no son estos. Respeto tus añoranzas y esa forma dulce de querer a tu pueblo siempre a la búsqueda de una fotografía con la que poder regar de lágrimas tus mejillas. Eres el prototipo de mujer capaz de endulzar con esas palabras tan tiernas que tu utilizas el regazo de los buenos y sensatos hombres que ha dado nuestro pueblo.

Es un honor tenerte en este foro porque solo personas como tú con ese ingenio tan particular pueden desde la lejanía levantar suspiros. Es una lastima María que una fotografía tuya no cuelgue de este foro para que la gente de tu generación pueda verte y decir esta es nuestra María.

Continua María deleitándonos con esa serenata tan hermosa. Mi padre dice creo que la recuerdo y yo le he dicho de qué y él me ha contestado de verla cogiendo collejas y yo le he preguntado donde y el me ha dicho en el camino que iba a la Hoz. Tanta Hoz para tan pocas collejas pero así es la vida. Desde esta incipiente semana a olor a membrillo me atrevo a decir ‘Maria, que bonito es el nombre de la madre de Dios!

2º Comentario:

Yo no se quién es María, ni tiene la más mínima importancia, ahora bien estaba claro que no era quién aparentaba ser y eso se puede comprobar si se repasan todas sus intervenciones en el foro. La última intervención tal y como tu dices es determinante ya que la misma María es la que hace la pregunta y se contesta a si misma. Además hay otra cuestión y es la forma tan clara que tiene de camuflar su personalidad intentando dar a entender que es analfabeta funcional. Para ello se sirve de la argucia de juntar palabras que aparentemente y sin este tipo de estrategia denotaría un lenguaje pulcro.

Además y como tu dices si bebe mahou hay más posibilidades de que sea hombre.

Ejemplo:
hola quetal megustaria poder tener el libro de anjel mota de alicante me andicho queha hechoun libro con fotos de pinarejo con testame el hera medico un saludo

Separando palabras quedaría de la siguiente forma:

hola que tal me gustaria poder tener el libro de anjel mota de alicante me an dicho que ha hecho un libro con fotos de pinarejo con testame el hera medico un saludo

Como se puede comprobar solo tres faltas: dos “h” y una “j” y un “ con testame”

Una persona analfabeta no sabe leer ni escribir. Un analfabeto funcional, en cambio, lo puede hacer hasta un cierto punto (leer y escribir textos en su lenguaje nativo), con un grado variable de corrección y estilo. Un adulto que sea analfabeto funcional no sabrá resolver de una manera adecuada, por desgracia, tareas necesarias en la vida cotidiana como por ejemplo rellenar una solicitud para un puesto de trabajo, entender un contrato, seguir unas instrucciones escritas, leer un artículo en un diario, interpretar las señales de tráfico, consultar un diccionario o entender un folleto con los horarios del autobús.

El analfabetismo funcional también limita seriamente la interacción de la persona con las tecnologías de la información y la comunicación, puesto que tiene dificultades para usar un ordenador personal, trabajar con un procesador de texto o con una hoja de cálculo y utilizar un navegador web o un teléfono móvil de manera eficiente.

Bueno, el asunto no tiene más importancia. Yo continuando con la broma de las collejas había preparado otra que más tarde publicaré.

3er. Comentario:

Nos querías engañar ¿........? y te han pescado como aquel día que te envió tu padre a ordeñar una vaca y al cabo de cuatro horas apareciste en casa con el cubo casi vacío y grandes señales de cansancio en tu cuerpo. Recuerdo al pobre hombre diciéndote pero ¡Maria! Tanto tiempo para tan poca leche y tu contestación inocente: ¡Padre es que el toro no se estaba quieto!

José Vte Navarro Rubio

FOTOGRAFÍA DE ADOLFO CARRETERO

                                                               

1er. COMENTARIO:

No importan los nombres aunque todos sabemos quienes son. Importa la gallardía, el temple, el salero, la estampa y la figura. Que mejor retrato que este para transponer los límites más inmediatos y adentrarnos en los confines imprecisos de otros momentos, puede ser que años 70/72 del siglo XX, en que éramos parte de ese espíritu que se respira en la fotografía y del cual podemos estar orgullosos. ¿No sé, quizás sea la calle de las Eras donde está sacada la fotografía? Me es muy familiar la imagen de la mujer bajando por la calle y las fachadas de las casas situadas a mano derecha del encuadre fotográfico.

Los perros y los jóvenes, las mujeres y el niño y con ellos la sencillez como único atributo. Monteras y albarcas y esa mirada felina y clara de personas en las que no cabe otros sentimientos que no sean los de vivir los días con esa intensidad que solo se puede adsorber allí donde la naturaleza convive con el ser humano desde los amaneceres de los días hasta los anocheceres de las tristes noches en los páramos y llanuras manchegas.

La fotografía trasmite ternura. Una ternura infinita y muchas nostalgias. Son estas las fotografías que nos pueden ayudar a entender esa parte del pasado que se nos va y que tenemos que dejar cuidadosamente en algún lugar para que las nuevas generaciones sepan algo más de nuestra cultura y de esa forma de vivir la vida tan ligada a esas imágenes serranas tan bien perfiladas y tan doctamente situadas ante el teleobjetivo de la cámara con el único fin de plasmar un momento que al menos a mí me ha servido para desparramar alguna que otra lágrima.

Eternamente agradecido por ese mensaje que trasmitió Zarcillos y que creo que está calando.

2º COMENTARIO:

La verdad es que no se me ocurre decir otra cosa que no sea alabar al pueblo y a sus gentes por una serie de cuestiones claras y fáciles de entender. Todos nosotros formamos parte de esa colectividad que tanto luchó a lo largo de la vida por sacar hacia delante a su familia y por vivir de forma humilde y honrada. Estos son a mi parecer los mejores atributos que se le pueden poner a una persona y de esto los de Pinarejo sabemos mucho. Nuestro pueblo no es un oasis y de estos mismos vientos viven otros pueblos y otras culturas. Esta y otras fotografías deben servir para crear cultura de pueblo y sobretodo para dejar unos cimientos sobre los cuales nuestros jóvenes puedan edificar un nuevo Pinarejo con puntos de referencia a nivel histórico y cultural. Creo en mi pueblo y sus gentes porque de personas honradas es querer a los nuestros y el respetar a los que se han ido.

3er. COMENTARIO:

Vuelvo A la fotografía. Es una necesidad impuesta por mi mismo ser que me exige dar respuestas inmediatas. Y vuelvo a incidir en lo que en mí viene a ser una constante. Un día en el foro salía a relucir lo mucho que yo alababa al pueblo cuando éste en cierta medida tenía sus limitaciones en muchos aspectos. En este sentido, que no se entiendan mal las palabras, mi argumento es que el querer no tiene que ver con la fachada sino más bien con los interiores. A partir de esta argumentación se puedan realizar otras muchas preguntas que tendrían sus contestaciones, pero no, el tema de mi intervención, tiene que ver en este preciso momento con la fotografía, afortunada en todo sus aspectos, y que nos debe servir para entender que las limitaciones impuestas por la sociedad se deben utilizar para que abramos bien los ojos y la mente. Veo en la fotografía ansias de vivir y sonrisas inocentes y eso me comporta un cierto sentimiento que me inunda y me obliga a trasmitir todo aquello que creo que puede servir como enseñanza. Confundí la calle, pero es que cuesta abajo y todo de blanco en Pinarejo es fácil equivocarse ¿Cuantas y cuantas mujeres vestidas de negro riguroso habrán pasado por la calle de las Eras después de ir a visitar a sus muertos allí en el camposanto? De ello me vino la confusión.

José Vte. Navarro Rubio

A UNA PLAZA DE TOROS PORTATIL

                                                                    

Estoy de acuerdo la fotografía tal y como fue realizada, seguramente sobre finales de la decada de los años 60, es para disfrutarla.

De sobra es conocido, aunque lo relacionado con los toros tiene sus detractores, que las actividades festivas que tienen que ver con la fiesta del toro, en el área del mediterraneo, son tan antiguas como la misma humanidad. El toro, dicho por historiadores y antropólogos, es un animal que aparece inmortalizado en las cuevas preshistóricas del sur de Francia y de la cornisa Cantábrica. Los toros son famosos en las culturas de Oriente Medio y en las Culturas Clásicas: romana y giega. Representaciones suyas en piedra y bronce (exvotos) se dan también en nuestra cultura iberíca: Albacete, Murcia, Guardamar del Segura etc.

Las Referencias escritas más antiguas sobre la fiesta de los toros son del siglo XV. Será a partir del XIX, y durante todo el XX, cuando las referencias a las fiestas de toros y a las corridas de bueyes, toros o toros bravos, serán muy abundantes.

Bien es verdad que la fiesta con el tiempo evolucionó. No sabemos desde cuando en Pinarejo las corridas de toros forman parte del programa de sus fiestas mayores. Antiguamente, las modalidades tradicionales de toros en la calle y de corridas coexistían. Será en el siglo XVII cuando las corridas, debido al empeño de los reyes de la dinastía borbónica evolucionarán como fiesta con reglamento y símbolos propios. De esta forma se conoceran con el nombre de "lidia" o de corrida de toros ‘a la castellana’.

Podemos situar, tal y como hemos dicho, la fotografía allá sobre finales de los años 60 del siglo XX. Las plazas, como era costumbre, se montaban para la ocasión, formándose el perímetro del recinto con carros y remolques de tractores que los aficionados colocaban días antes de la corrida. Los animales hasta el momento de la corrida permanecían estabulados en algunos de los muchos corrales situados cerca de la "Plaza Mayor" de Pinarejo. Lugares habituales eran "el corral de los Churrispas", en la misma plaza; "El corral de Sandoval",junto a la "era del Palomar"; o en los bajos del "antiguo Ayuntamiento".

Aunque lo normal era que el perímetro de la plaza fuera circular, con el fín de dar una mayor visibilidad al anularse los rincones y puntos ciegos, en lo que es motivo de este escrito: la fotografía, la plaza no guarda este orden, ya que los carros y remolques aparecen colocados de forma cuadrangular o rectangular. La corrida, a la que nos referimos, con novillo y torero incluido, debió celebrarse en un corral y entre las prendas típicas de la zona manchega aparece, como santo y seña,la boina sobre las cabezas de algunos de los aficionados que desde lo alto de los carros seguían el trance.

¡Buena es la fotografía! si tenemos en cuenta cuando fue realizada y el calibre de la máquina. No sé, ni precisaré, el nombre del torero, aficionado, a todas luces. Bién podría ser Mario, José Antonio, a saber, quizás, alguno de los muchos aprendices a torero, maletillas, que vagabundeaban a sus anchas por los caminos, sendas, veredas y cañadas de la Mancha, en el mes de septiembre, a la espera de "su ocasión" y de poder emular al ídolo de las masas por excelencia de aquellos días: "El Cordobes".

Lo bien cierto, después de todo lo dicho hasta el momento, es que las fiestas de Pinarejo no se pueden pensar sin toros. Ahora con su plaza estable, la fiesta está más arraigada que nunca y al sol del verano y de las bien merecidas vacaciones los pinarejeros/as no residentes en el pueblo aprovechan el descanso estival para acudir al terruño natal para disfrutar de la compañia de sus parientes y amigos. De esta forma podemos decir que no hay una buena fiesta sin corrida de toros y a esto último podemos acompañar una serie de refranes:

"Cuando hay toros no hay toreros, y cuando hay toreros casi nunca hay toro"

"Cuídate del toro por delante, de la mula por detrás y de los frailes por todos los lados"

José Vte Navarro Rubio

DESDE EL MOLINO

Me encanta esta fotografía que viene a descubrirnos un paisaje de nuestra localidad irrepetible y entrañable. Lo bueno de esta fotografía aparte de la gracia con que fue concebida, es que desprende sabor a pueblo antiguo anclado en la prehistoria. La fotografía es única y más si tenemos en cuenta que el molino ha sido totalmente remodelado y que el paisaje que se divisa a lo lejos, nuestro pueblo, aunque no ha cambiado de ubicación, si que ha variado en lo que se refiere a la forma en como han sido rehabilitadas algunas de las viviendas de la localidad.

¡Que bonita es la imagen del pueblo que habita en mi memória! A mi me gustan los pueblos con saber a antiguo; con olor a leña cuando caminas por las calles camino de tu casa; sin ruidos; con los vecinos suficientes como para no sentirte un extraño; con olor a tierra mojada y sobretodo me gustan los pueblos donde puedes sentir que tus rasgos personales no son únicos y que tu personalidad forma parte de aquellas imágenes y de aquellas palabras que a diario puedes ver y escuchar en cualquier lugar o rincón del pueblo cuando paseas.

Pinarejo es más que un pueblo para todos los pinarejeros/as. Por eso los que por desgracia vivimos lejos nos acercamos de vez en cuando hasta su misma alma, la plaza, el molino y la iglesia, para recuperar esa parte de nuestra infancia que nos hizo tan felices.

Me gusta el sabor a antiguo de mi pueblo, por añoranza de otros tiempos ya pasados y porque es muy fácil descubrir en esos paisajes retazos de tu vida que se quedaron para siempre en el pueblo el día de la partida. Se podrían contar mil anécdotas de nuestro pueblo. Anécdotas que se han ido pasando de padres a hijos y que lo más seguro es que caerían en el olvido si alguien no se atreviera a trasmitirlas. De esta forma tengo una anécdota graciosa, ya casi no la recordaba, es mi hermano el que me ha hecho el gran favor de trasmitírmela y dado que la conciencia debe ser colectiva yo se la voy a contar a ustedes.

Relato: Había en el pueblo allá por el año 1927 un maestro, natural de Santa María del Campo Rus, llamado D. José, de apodo Chaquetón, ya se pueden imaginar el porqué de este apodo, que se dedicaba a enseñar las cuatro letras y poco más entre la chiqillería del pueblo, más dada a tirar guijarros con la onda, y hacer uso del gomero en la Veguilla, que a recibir lecciones de aquel personaje extraño que de vez en cuando les dejaba marcados los nudillos en la testera. El hombre como podía intentaba trasmitir a sus pupilos aquello que él pensaba que era imprescindible para poder andar por la vida con un cierto decoro. Sus ganas de enseñar chocaba con la cabezonería de sus alumnos que cuando se ponían delante de él para recitar la lección más pensaban en el capón que en lo que se les preguntaba. Por eso nuestro maestro, Chaquetón, hizo una frase inmortal que nuestros padres en algunos casos nos han trasmitido: "Es un mal incurable la borriquería el que burro nace, burro se cría". De todos los púpilos de aquella promoción nacida en el año 1920, resaltó por sus dotes uno. D. Jose, cada vez que lo sacaba a la tárima y éste no contestaba a las preguntas que sagázmente se le lanzaban, solía recitarle el estribillo al mismo tiempo que lo golpeaba contra el canto del encerado. Toda una pedagógia...

Vaya este relato por este buen hombre que quemó lo mejor de su vida en una batalla inútil. El pueblo eternamente le debe estar agradecido por su coraje y pundonor demostrado en el empeño y en el buen uso que hizo de su cargo durante el tiempo que como maestro ejerció en el pueblo, siempre con las mismas ganas e ilusión aunque la misión era difícil y de alto riesgo.

Volviendo al tema de la fotografía y del molino no está de más recordar algunas de sus partes: Velas, teleras,lienzos, piedra de rebote, rueda catalina, linterna, freno, tolva, canaleja y de sus piedras molederas: volandera, solera, bancada, rayones, redor y barrón. Entre las medidas rurales que se usaban para pesar y medir los áridos estaban: la fanega de trigo: 44 Kg.;la fanega de cebada: 33 Kg.; la media fanega; la cuartilla: cuarta parte de la fanega y el celemín equivalente a 4.625 ml. El perímetro del molino es de 1/2 fanega; su diámetro de 6 metros; su altura de 11 metros; la altura del cono de tres metros; el perímetro exterior del molino es de 20 metros y las escaleras de caracol hacían un total de 27 escalones de unos 17 centímetros de altura cada uno y se solía moler una fanega de áridos en una tarde.

Para acabar se me ocurre que se podría proponer al Ayuntamiento e PInarejo, a su alcadesa, que realizara un almanaque para el año 2011 y que en él figuraran las fotografías más valoradas de este foro.

José Vte Navarro Rubio

FAROLES DE LA IGLESIA

Foto: Faroles




DEL AUTOR DE PINAREJO EL MEJOR PUEBLO DEL MUNDO


Esta fotografía nos traslada a una de las zonas del pueblo más sensibles y más antiguas de Pinarejo. En sus origenes el pueblo debió de asentarse en lo más alto del cerro. De esta forma y alrededor de la iglesía comenzarían a construirse las casas más viejas del pueblo, unas al lado de otras llegarían a formar una especie de fuerte reducto de seguridad que no necesitaba de muralla para la defensa de los moradores que habitaban en su interior, en el caso de ser atacados por el enemigo. En esta zona la fabrica de las casas suele tener entre sus componentes paramentos de piedra que se combinan con la cal y el canto y en otros lugares con el adobe. Es facíl comprobar esta hipótesis, recinto cerrado, si subimos hasta la era de D. Pepe o hasta el Molino, desde allí podemos comprobar como toda la zona que rodea a la iglesia se configura de forma diferente al resto del pueblo.

Después la trama urbana del pueblo se fue ampliándo, terminado por ser tal y como lo vemos hoy en día. Nuestro pueblo hasta mediados del siglo XVIII perteneció al Castillo de Garci-Muñoz y con la liberación, de ese pesado yugo, el pueblo comenzó a crecer llegando a tener en determinado momento unos 1700 habitantes. Para el año 1829 los habitantes contabilizados eran 1.381, descendiendo en el año 1921 a 1.245 hab. Como vemos las cifras han ido variando en función del grado de calamidades que han afectado a la población bajo la forma de epidemias, hambrunas y guerras. Para estos días de los que estamos hablando, 1921, nos encontramos con que sus principales productos eran los cereales, el vino y aceite; cría de ganado lanar y cabrío; abundando en el término la caza de perdiz y liebre, ya por entonces el pueblo tenía alumbrado eléctrico y escuelas nacionales.

Pinarejo es un diminutivo de pinar, lo cual es bastante significativo y nos da a entender que en la zona habría antiguamente un pequeño pinar que con el tiempo y como consecuencia de los sucesivos aumentos demográficos se talaría. El pino sujeto activo de nuestra historia aparece representado en el escudo de nuestro pueblo.

Pero no nos vayamos por los cerros de Ubeda y centrémonos en la fotografía. Esa era mi misión cuando comencé a escribir el artículo. La verdad sea dicha es que el alumbrado ayuda y mucho y gracias a este detalle podemos resaltar ciertos aspectos que de otra forma hubieran pasado desapercibidos. Esa media luz caida sobre el lienzo de la fachada de la iglesia da profundidad a la calle y ennoblece todo el conjunto que se ve sometido al imperio de una oscuridad que cierra el marco de la fotografia en su parte superior y allí donde la calle queda cortada por la fachada de una casa, no tan noble, pero eso sí útil para sus moradores.

José Vte. Navarro Rubio

NATURALEZA

Aprovecho el momento para comentar ciertos aspectos que tienen que ver con unas fotografías del foro en las que se ven paisajes con nieve de nuestro pueblo.

Siempre se ha dicho que los de Pinarejo tenemos mucha imaginación. Bueno, pues yo después de ver las fotografías me imagino, aunque lo que van a leer no entra dentro del marco fotográfico: A las ovejas balando en las majadas, a los pastores en los chozos comiendo gaspacho manchego, a las liebres saltando sobre la nieve, el agua helada en los abrevaderos, a una pareja de enamorados cogidos de la mano y sentados junto a una chimenea, a las bestias de labranza comiendo en las cuadras, a los labriegos jugando al mus en la taberna y a las aldeanas cardando lana ¡Cuantas cosas se imagina uno!

Ya que de nieve estamos hablando viene a cuento transcribir, a continuación, lo que vió un cortejo de personas que transitaba por nuestras tierras y el raro fenómeno atmosférico que surcó el cielo en el invierno del año 1433, seguramente y a lo visto, según el cronista encargado de relatar los hechos, hay que hablar de un cometa.

En tiempo del rey Juan II, año de 1433, relata el cronista Gómez de Cibdarreal, que hubo una nevada muy grande en ls fronteras de Aragón y Navarra que duró 40 días, nevando todos los días. En diez leguas alrededor del Castillo de Garci-Muñoz aparecieron muertos 1400 venados, puercos, ciervos, cabras montesas y otros animales (capítulo I año 1433 de la crónica de Juan II)

Continua Luis de Bonilla diciendo en su artículo, publicado en la Estafeta Literaria, número 633, año 1978, que los alrededores de Garci-Muñoz que hoy vemos al pasar por la carretera eran entonces ricos bosques con leguas y leguas de tal abundancia de caza mayor como no hubiéramos sospechado.

Los culpables de lo que vemos ahora, tierra y más tierra sin árboles es consecuencia de la codicia de los pequeños y grandes propietarios de tierra que talaron los bosques, esto ha traído como consecuencia el cambio de la climatología y la extinción de las especies venatorias.

José Vte Navarro Rubio

RECOGIMIENTO

                                                                

Se ve que este hombre tiene lo que en términos técnicos se conoce con el nombre de “ojo fotográfico”, ya que es capaza de combinar colores y de sacar un buen rendimiento a la cámara fotográfica que a todos luces debe de ser, por los años en que se sacó la fotografía, un equipo sencillo o básico. Digo lo de que tiene “ojo fotográfico” porque si siguen su serie fotográfica, (excepcional: para quitarse el sombrero) editada en este foro podrán comprobar que es capaz de sacar el mejor rendimiento a los distintos escenarios ennobleciendo los lugares. Para ello se aprovecha del correr de las horas del día y de los cambios de luz. Su estilo es muy personal ya que todas sus fotografías están rematadas con el mismo gusto y estilo. Debe ser una persona sencilla, amante de la naturaleza, un enamorado de su pueblo y sobretodo muy tranquilo. Debe ser de las personas que espera pacientemente a que el día caiga para colocar la maquina de fotografiar en posición y lanzarse sobre su presa con el ánimo de disfrutar.

No estaría de más crear un concurso de fotografía en Pinarejo y exponer entre otras estas fotografías, pues sólo este hombre ha sabido inmortalizar, de una forma magistral, y en seis fotografías nuestra alma inquieta y solidaria. Serviría este concurso para juntar en las fiestas del pueblo a todas aquellas personas que sienten una pasión muy parecida por la fotografía. Ayudaría el concurso también a intercambiar experiencias y a permitir al resto de fotógrafos a saber cual es su nivel en cuanto a calidad de su trabajo. Se debería permitir todo tipo de fotografías: de paisajes, de retratos, de edificios, de enseres, de herramientas. Es decir de todo aquello que nos ayude a pensar y a soñar con nuestro pueblo.

Animo a todos aquellos amantes de la fotografía a que contesten la siguiente pregunta: ¿En que lugar del pueblo está sacada la fotografía y de quién es la casa cuyo portalón aparece a la derecha de la imagen?

José Vte navarro Rubio

EL MILAGRO DE PINAREJO: FRAY FCO. DE LA CRUZ


No se si lo que viene a continuación es un hecho extraordinario o simplemente un suceso fruto de la imaginación. Lo que sí es cierto es que el suceso tuvo lugar en Pinarejo y como escenario más particular una procesión y la iglesia parroquial. Esa misma iglesia que nuestro amigo el fotógrafo nos muestra por dentro (cúpula y altar mayor)

El relato tiene que ver con el extraordinario suceso que le ocurrió a Fray Francisco de la Cruz, hace de esto unos 363 años. Este santo se venera en La Alberca del Záncara desde el año 1647.

Estando, Fray Francisco de la Cruz, en la quietud de la oración tuvo ilustración particular de que asistiese a la fiesta en el día de esta Sagrada Octava que se hiciese en el Pinarejo, lugar pobre, dos leguas distantes de la Alberca, también del Obispado de Cuenca.

Esta proposición la hizo a su Padre espiritual y Prior; y le pareció tan bien, que le dijo era muy justo ir a asistir en aquella celebridad y ayudar en ella al Licenciado Franco, Cura de aquel pueblo, y que él quería también acompañarle, para que los dos asistieran juntos.

Llegó aquel dichoso día, y tomaron la mañana Maestro y Discípulo y fueron a tenerle en el Pinarejo. El Licenciado Franco los recibió con mucha alegría, porque conocía muy bien a los dos asistentes que Dios le había enviado. Celebróse por la mañana el Oficio con mucha devoción y respeto y con la autoridad que podía dar de sí lo limitado de aquella población.

Hízose la procesión por la tarde, asistiendo los dos Religiosos junto al Preste, y desde que se empezó el Padre Fray Juan de Herrera iba reparando en el rostro de Fray Francisco, porque le parecía en las demostraciones exteriores que se movía con afectos de demasiada alegría, y que habiendo de andar procesionalmente caminaba tan vuelto de lado por ir mirando siempre a la Custodia con tan perseverante vista, que no apartaba los ojos de ella, dando siempre los pasos de espaldas, al modo de los que en las procesiones van incensando, conociéndose en él (aun con algún género de destemplanza) los soberanos gozos en que estaba su corazón bañado.

De esta suerte fueron procediendo entrambos hasta que volvió la procesión a la iglesia y el Santísimo se puso en el Altar mayor, quedando juntos de rodillas en la grada primera los dos Religiosos. Entonces el Padre Fray Juan de Herrera le dijo a su compañero: -Dígame, Hermano, y mire que se lo mando con Obediencia: ¿qué divertimento ha sido el que ha tenido todo el tiempo de la procesión, que con diversos movimientos de los ojos y del cuerpo le ha estado significando? Fray Francisco le respondió: -¿Cómo quiere Vuestra Paternidad que no haya estado contento y divertido, si desde que empezó la procesión se llenó todo el aire de la iglesia de hermosísimas mariposas, las cuales Nuestro Señor fue servido de darme a entender que eran tropas de Espíritus Angélicos que venían a servir y celebrar la festividad de su Dios Sacramentado, supliendo los medios humanos de este pobre pueblo las Inteligencias Soberanas, y que para mayor confusión mía de lo que soy y de lo que debo ser, al punto que se volvió ahora a poner la Custodia en el Altar, se llegó una mariposa hermosísima vestida de diferentes colores junta al viril de la Sagrada Hostia, y después de estar alrededor de él revoloteando se vino derecha a mí y se me puso en la boca, como quien llega a recibir un recado de un Príncipe y le lleva a quien se le envía, dándome Nuestro Señor en esta ocasión un claro conocimiento de que así premia la devoción que tengo a su Divina Majestad Sacramentada y de que le son agradables mis comuniones?

Cesó el Siervo de Dios, acabando la plática con algunas demostraciones y lágrimas, causadas del excesivo contento que cercaba su dichosa alma; y el Padre Fray Juan de Herrera le dijo que hiciese diferentes actos de humillación y agradecimiento.

DIVERSOS COMENTARIOS A UNAS FOTOGRAFIAS


                                                                         

Que estaría buscando el autor de nuestra fotografía al plasmar con la máquina el lienzo de pared, la nieve y lo que parecen ser las ramas de un árbol. Enigmática es la foto pero todo en la vida tiene respuesta. Nuestro fotógrafo buscaba algo más que una fotografía. Iba al encuentro de su infancia dejada un día en aquella casa de su pueblo Pinarejo. La foto es algo intrascendente lo que sí tiene importancia es el gesto a la hora de intentar rescatar algo de lo cual guarda un recuerdo lejano pero agradable en su memoria. La pared, el árbol, el patio, la casa, el corral, todo es en esencia lo mismo, aunque no lo veamos. Añoranza diría yo que es por los días pasados que ya no volverán. Pero mira por donde en la vida siempre hay momentos para volver a los orígenes, no importan las canas, ni el tiempo pasado ni las circunstancias por las que puede caminar la vida de uno. Todo es empeño y ganas. El mismo empeño que, en resumidas cuentas, a puesto nuestro fotógrafo para legarnos esta fotografía a la que yo rebautizaría con el nombre de “La infancia perdida”. No hace falta más que leer el subtítulo que acompaña a la fotografía para entender de lo que estamos hablando. Es la casa de sus padres, su casa. Su única casa en el pueblo de su vida.
Otra descripción:

                                                                        
                                                                  

Es una fotografía rara. Muy rara. De esas que dan escalofríos. Vaya puntería y que aguante. Es difícil predecir el momento del día en que fue realizada. Por parecer yo diría que anochece y esa imagen más blanca que sobresale debe ser el sol poniéndose entre las nubes ¿Pero no sé? Podría estar sacada en un día de esos grises en los que de repente el cielo amenaza tormenta. Podría ser. Es una fotografía para ser pintada. Esas transparencias sobre las tinieblas y esos rayos de luz que caen hacia la tierra dan a la fotografía fuerza y espiritualidad. Yo creo que a la Capilla Sixtina le falta un cielo como éste para expresar el juicio final.

Sobretodo me gusta esa luz difusa que cae sobre la tierra momentos antes de que la oscuridad más absoluta se hiciera dueña del orbe.

Estos cielos llenos de interrogantes sólo se pueden contemplar y disfrutar en lugares como nuestro pueblo, Pinarejo, libre de contaminación lumínica. Teniendo el lugar el resto es fácil sólo queda disponer de tiempo suficiente y paciencia para clavar con la cámara aquello que uno ve y de lo cual se encuentra disfrutando.

Si le falta algo a la fotografía no es culpa del maestro. Yo diría que para ser perfecta le falta la imagen del Espíritu Santo. Pero claro esto ya son palabras mayores.


                                                                         

Esta fotografía tomada a través de un espeso follaje y de un tapial/lienzo de pared, prolonga nuestra visión más allá de los confines de la Plaza Mayor de Pinarejo y nos lleva por encima de los tejados de las viviendas hasta la iglesia del pueblo. La fotografía nos introduce en un paisaje dominado por un campanario desde el cual unas altivas campanas, hoy nuevas, fueron utilizadas durante siglos para llamar al vecindario a los diferentes actos que tenían que ver con la liturgia. Aparte de esta utilidad el toque de campas, repique, servía, también, para avisar de algún peligro eminente o de algún tipo de incidencia (incendio, tragedia) que pudiera tener especial interés para la comunidad. Resultaba entrañable oír el sonido de las campanas, su musicalidad, sobretodo los domingos o días festivos, cuando la gente se encontraba en alguna parte del término, realizando labores agrícolas o que tuvieran que ver con el pastoreo. Suponía un gozo difícil de explicar y del que muchos no podrán disfrutar. A mí particularmente me gustaba su sonido cuando las oía y me encontraba en la zona del Charcón.

Pero con el paso del tiempo, al igual que ocurre en todas las profesiones, el oficio de campanero se ha ido perdiendo y con él se ha ido también una parte importante de nuestra cultura que tiene que ver con el repique y el volteo de las campanas. Con la modernidad vino la electrificación del sistema y más tarde con la megafonía la perdida del hilo conductor que unía la tradición y la costumbre con nuestra forma de entender el mundo de las campanas y sus toques, apareciendo una moda nueva para la cual no encuentro nombre apropiado. Los toques de campana han perdido parte de aquella primera función para la que fueron creadas: alertar, informar, reclamar y servir de guías y de acompañamiento a los actos religiosos, culturales y hasta lúdicos de nuestros pueblos.

Muchas campanas, como las de Pinarejo, debido al paso del tiempo y a su uso continuado terminaron por sufrir fracturas que hacían inviable el uso para el cual habían sido concebidas.

La alternativa cuando el deterioro de las campanas se hace muy grande consiste en fundir las viejas y hacer unas nuevas, que por mucho que se quiera nada tienen que ver en cuanto a sonido, con las viejas. Dos son los motivos por los cuales no se puede equiparar las campanas de hoy en día con las de antes: la calidad del metal y la técnica de confección.

Bien situada la fabrica de nuestra iglesia en lo más alto del pueblo y mejor situadas las campanas por encima de todas las viviendas de la localidad, su sonido, alegre cantar en las primaveras, se había venido trasmitiendo a lo largo de los siglos, como por arte de magia, impregnado su musicalidad todos los lugares del término, por muy recónditos que éstos estuvieran. Ahora eso sí dependiendo del lugar en el que nos encontráramos percibíamos su sonido de una forma u otra. Recuerdo como ante su toque, repique, las mujeres preferentemente salían a las puertas de las casas para realizar preguntas; otras aceleraban de inmediato las tareas del hogar que estaban haciendo en esos momentos, con el fin de acudir al acto para el cual se reclamaba su presencia. Durante el tiempo en que las campanas estaban repicando se veía a las buenas gentes salir de sus casas y encaminarse lentamente, sin prisas y sin pausa, hacia el lugar de donde venía el sonido con el fin de cumplir con sus obligaciones para con la iglesia.

Cada repique tenía su justificación. El toque de difuntos, seco y desnudo se hacia de forma lenta y paulatina, como si el campanero no quisiera tocar o como si las campanas se hubieran puesto de huelga. Cuando el fallecido era un niño pequeño se tocaba a gloria. El toque de arrebato o fuego: Como su nombre indica servía para llamar a los vecinos para combatir el fuego. El toque de rogativas servía para bendecir campos. El toque de fiesta se utilizaba durante la fiesta mayor del pueblo. El toque de Ángelus era a las 12 del mediodía y era un toque muy especial. El toque de misa se utilizaba cada vez que se llamaba para este acto. Muchos eran los toques y variadas las técnicas. Hoy en día y con el fin de no perder esta tendencia se han creado en muchos lugares gremios de campaneros que se encargan de recopilar toques y de preservar para las generaciones futuras los diferentes toques de campanas que por costumbre se utilizaban en muchas iglesias de nuestro país.

A mi entender, aunque es difícil pedir neutralidad, las campanas de nuestro pueblo sonaban de forma diferente a como suenan las de las grandes ciudades. Yo diría que la diferencia entre unas y otras se encuentra en que las campanas de los pueblos como el nuestro, Pinarejo, tenían alma, es decir comulgaban directamente con su medio ambiente y las de las grandes ciudades están sometidas al imperio del ruido y de la contaminación.

Ahora en estos momentos sólo hace falta de manos diestras que aprendan el interesante arte de hacer repicar las campanas, para que la melodía exquisita que se desprende al chocar el badajo con el metal y convertirse éste en música se pueda expandir por todo el término.


                                                                              
Comentario:

Que duro eran los inviernos y más el que nos viene a describir esta fotografía. Molino y cementerio parecen estar unidos por un mismo destino llamado soledad. Será por eso el que los vecinos del pueblo tengan por costumbre ir hasta el Molino para pasear; para recoger setas de cardo en los barbechos y lindes de los campos cercanos al monumento y para bolear. Cementerio y molino han estado unidos desde el mismo momento en que el cementerio viejo del pueblo fue clausurado y se construyó el nuevo en el lugar donde se encuentra enclavado hoy en día.

Bonita imagen la que contemplamos puramente meseteña, pero lo que para nosotros se nos antoja bello para otros en su momento fue sufrimiento y dolor. Los inviernos invitaban a la muerte que casi siempre recaía sobre los más jóvenes y los más viejos y también a la soledad en el interior de las casas cuando el frío apretaba y las personas se encerraban en ellas para calentarse junto a las chimeneas. Personas y animales convivían en los recintos interiores de las casas y estaban marcados aunque por destinos diferentes por unos mismos patrones: el perro para cazar o cuidar el ganado; el gato para hacer compañía; los animales de corral para ser comidos; los animales de labranza para trabajar en el campo. Nadie sobraba en las casas. Todos eran necesarios y útiles y vivían en completa armonía hasta que la necesidad hacia que desapareciera el vínculo entre el ser humano y el animal.

Con el tiempo se pierde todo hasta las buenas costumbres. Nuestro pueblo tenía a gala ser uno de los pueblos de la Mancha con más cabezas de ganado. Sirve para esta ocasión contarles que allá por el año 1708 transitaron por el Puerto Real de Chinchilla, entre los días 21 y 23 de noviembre, 8.959 cabezas de ganado, pertenecientes a los pinarejeros: Francisco Melgarejo y Julián Belinchón. Cabreros, duleros y zagales bien provistos de albarcas, zamarra, camisones, montera, petos y garrote en mano guiaban a las ovejas camino de los buenos pastos. Tenían los pastores como fieles aliados a los mastines que de continuo solían achuchar cuando alguna oveja se separaba del rebaño. Por aquellos caminos barruntaban los rebaños por hambre y sed hasta que llegaban a las rastrojeras donde se dedicaban a pastar durante unos días y a disfrutar rumiando la hierba, ricia. Muchas ovejas caían en su peregrinaje víctimas de la apostema, de la bacera, del carbunco, de la jalasia, del pelo, del tontillo y de la bien conocida modorra. Otros, los cabritillos, recentales, vagaban perdidos en medio del rebaño hasta que encontraban a su madre y la compañía se hacia inseparable. ¡Cómo se reconocían madre e hijo! Igual daba su procedencia: alcarreñas, churras, granadinas, malagueñas, manchegas, merinas, muesas, murcianas o serranas, el instinto siempre era el mismo. Los pastores huían de los arreñales y buscaban los barbechos camino de los apriscos, majadas y rediles y así día tras día y noche tras noche.
José Vte Navarro Rubio

POEMA: DESPRENDEN LOS DE PINAREJO

Felicitación, satírica de Navidad, realizada con el ánimo de no molestar a nadie. El contenido del poema es pura invención que tiene que ver con ciertos aspectos particulares de nuestra forma de ver y entender la vida, me gustaría que por encima de todo sirviera simplemente para reírnos un rato y alegrarnos en estos días.

Desprenden los de Pinarejo
desde siempre
mucha alegría cordial y sana
pues les viene en los genes
el mundo de la farándula.
De esta forma taconean
y bailan sevillanas,
ya sea en los toros, en las fiestas
o cuando se van de jarana.

Y sienten mucha morriña y desgana
cuando fuero de Pinarejo
a trabajar se marchan
por eso siempre llevan
en el fondo de la cartera
y en lo más recóndito del alma
una fotografía familiar y una estampa
de su querida patrona Santa Águeda.

Hidalgos de palabra recia y clara
cuando estrechan la mano
sellan de por vida una perpetua alianza
y es tan fiel y duradera su amistad
que ni con la muerte se acaba.

Son algo de cabezones ¡Cómo Dios manda!
pero en grandeza de corazón
y en ganas de complacer no se les gana,
por eso yo siempre recomiendo paciencia
cuando con ellos distendidamente se habla
ya sea de fútbol, de labranza
o de la dichosilla caza.

Las mujeres son fuertes y guapas
y cardaban con tantas ganas
la compacta borra y suave lana
que hasta les salían moraduras
a los pesados colchones de las camas.

Les gusta como a los catalanes
el oro, el euro y la plata,
que ganan de forma más que honrada,
pero ni lo adoran ni lo guardan
en las incomodas faldiqueras
ni en las agobiantes fajas.
Se lo gastan cuando les viene en gana
en dar bienestar a su familia
y, como no, en su propia casa.

Son como un río fértil
de aguas cristalinas y claras
en su Castilla natal
y en su esteparia Mancha,
por eso a los de Pinarejo
se les puede encontrar
ya sea en Paris, en Londres,
en el frío y helado Himalaya
o en la calurosa ciudad de la Habana.
¿Ahora mucho ojo con lo que se hace
y a quien se arrima el ascua
que al instante todo se sabe
en el foro milenario que hay
en su coquetona y centenaria Plaza?

Especialistas en cacerías
y en contar mil batallas
fijan muy bien los pies al suelo
y los codos a la barra,
ya sea en el bar de la Carrera
en la piscina o en la Plaza,
por eso si te apuntas a beber
debes saber que la ronda nunca se acaba,
el problema no está en el pagar
ya que ninguno se esconde o da la espalda,
el problema viene cuando la juerga se acaba
y ves como la vista se pone borrosa
y las calles se hacen dobles,
estrechísimas y muy largas,
y desaparecen como si fuera
por arte de pura magia
las llaves, la estampa de Santa Águeda,
y las puertas y ventanas
de las fachadas de las casas.
Por eso yo recomiendo,
¡hagan caso por el consejo,
que aquí no se paga!,
dejar una flauta en la mesita de la cama
con el fin de que cada feligrés se guíe
por la melodía que le marca su amada
con la flauta desde la cama.

José Vte. Navarro Rubio

RECETA DE LAS ABUELAS PINAREJERAS: 2

Guiso de habas tiernas con su vaina:

Dicho: En abril las habas en el mandil

Copla del autor de Pinarejo el mejor pueblo:

El guiso de habas
no es difícil de preparar
consiste el secreto
en que estén muy tiernas
y por supuesto sin granar
y como no faltaría más
en su punto justo de sal.

-500 gramos habas tiernas para cocinar con la vaina -1 cebolla -1 tacita de aceite -1 cucharada de orégano -1/2 litro de Agua -sal –Pimienta.

1º Limpiar las habas: trocear pelar y trocear la cebolla.
2º Calentar el agua con un poco de sal en una cazuela.
3ºCuando hierva poner las habas y la cebolla, y cocer durante 15 minutos.
4ºSacar y escurrir.
5ºCalentar el aceite en una sartén y rehogar las verduras con un poco de sal, una pizca de pimienta y el orégano durante 10 minutos.
6º Estrellar un par de huevos y poner un punto de vinagre.
7º Listas para comer.

José Vte. Navarro rubio

LA RECOLECCIÓN DE LA ACEITUNA

Los olivos, documentados desde el siglo XVI en Pinarejo, son de los pocos árboles presentes en el termino cultivable de Pinarejo. Mas de un millón y medio de kilogramos de aceitunas se recogían en nuestro término que iban directamente a la almacera para convertirse en rico y sabroso aceite. Las variedades de aceitunas más cultivadas en Pinarejo eran la asperilla, manzanilla, cornicabra y gordal-a. En la época de recolección los pinarejeros/as salían al campo para recoger las aceitunas que luego depositaban en grandes montones, separadas por clases, en los patios de las casas, antes de ser llevadas a la almacera. Pero con anterioridad a este arduo trabajo nuestras madres, para la fecha de todos los Santos, según viniera el año, cogían para el uso doméstico aceitunas verdes que luego solían preparar generalmente de dos formas rayadas o en sosa.

Para la época de la recolección los tres útiles que más se usan son los cachuchos, costales y cenachos. En lo que tiene que ver con los cachuchos la palabra como tal ha desaparecido del diccionario de la Academia de la Lengua Castellana, en este sentido se les ha hecho la observación y en poco recibiré la contestación.

De todas las formas y aunque la tradición recolectora continua, el bajo valor de la aceituna y lo caro que resulta su recolección ha repecutido de tal forma que la producción de aceitunas en nuestro pueblo ha bajado. De esta forma lo que podía haber sido una fuente extra de riqueza se ha convertido casi en un trabajo que no va más allá del puro ámbito familiar. Entre enero y febrero se suele realizar la recolección en sus variedades ordeño, sacudida, recogida del suelo y vareo y la poda se realiza allá para los meses de marzo /abril.

La plantación tradicional de olivos en Pinarejo ha sido desde siempre en hilo o a manta (de forma desordenada). Para el año 1750 había en Pinarejo 159 almudes de olivos plantados a razón de 25 olivos por almud (75 por Ha). De ellos 2 almudes eran de primera, 61 de segunda y 96 de tercera. Total de oliveras declaradas en aquellos momentos: 4.575.

Variedades:
Cornicabra: Su nombre proviene de la característica forma de cuerno en su fruto, aunque también se le llama cornezuelo, Se suele recoger en los meses de enero y febrero, momento en que se encuentra en su periodo óptimo de maduración, en este momento la aceituna se caracteriza por un intenso color violáceo alcanzando un rendimiento graso bastante alto, en torno al 19%.
·El color de la aceituna varía dependiendo de su periodo de maduración, siendo verde en su nacimiento, morada en su madurez y negra-violácea en el momento de su recogida.
·Aceite cornicabra se caracteriza por su elevado rendimiento graso y su alta estabilidad.
·El aceite virgen extra aporta vitaminas A, E y D.
·En el uso, es el que mejor sabor da a salsas, ensaladas y guisos.
·Es sano, saludable y de más fácil digestión, beneficioso para el crecimiento óseo y el desarrollo del cerebro y del sistema nervioso.
·El consumo de aceite virgen extra previene de enfermedades circulatorias y cardiovasculares.

Manzanilla se caracteriza:

-Por su intenso color verde-pardo de gran calibre.
-Sus frutos son redondeados y de piel fina y con una textura en su pulpa muy firme.
-La forma de elaboración artesana es la que aporta características singulares a las aceitunas, que son rajadas longitudinalmente y después se someten a un proceso de curación, usando en su aderezo ajo, tomillo, orégano, hinojo, laurel y cilantro, dando como resultado un producto tradicional, de sabor único y original.

Otras variedades son la gordal-a y la asperilla

Poesía del autor de Pinarejo el mejor pueblo:

Dormidos están mi Pinarejo
los campos de olivos
desde aquellos días
en que fueron plantados
a sabiendas
de que nunca jamás
podrían ser algo más
que testigos de la historia.

Ellos que dan lo mejor de su ser
que son las aceitunas
duermen eternamente
como sí para ellos la vida
no fuera nada
y el tiempo solo
parte de la maquinaria de un reloj
que mueve periódicamente sus saetas
en el mismo sentido.

Parecen los olivos satisfechos
con sus eternos descansos
sólo interrumpidos
por los cambios de las estaciones
y por las floraciones que visten
sus espesas cabelleras
y preparan sus ramas
para ser madres
que no verán más allá
del primer año de la infancia de sus hijos.

José Vte. Navarro Rubio

GRACIAS A JENA POR SUS FOTOGRAFÍAS

Debes saber amigo que detrás de un fotógrafo se esconde siempre un poeta y un romántico de la vida. Supongo que tus fotografías destilarán poesía. Intentaré con ellas realizar un paisaje sobrio y ameno. Gracias por tu confianza y por cederme, en la parte de texto esas perlas, hijas preciosas tuyas, que supongo guardabas en alguna caja de aquellas de latón con olor a menbrillo que nuestras abuelas escondían celosamente como si aquello fuera un tesoro. ¿Cuantas fotografías se habrán ido al carajo?

Coplilla:

Haré con tus fotografías un poema
y un homenaje a nuestro pueblo
pues del pueblo salimos
y al pueblo volveremos.

José Vte. Navarro Rubio

CASA CON ESCUDO EN LA CALLE MELGAREJO

                                                                      


Esta fotografía está mejor lograda que la anterior en ella se vislumbra en su totalidad tanto los elementos de adorno de la puerta como el gran ventanal que se abre encima del dintel de la puerta. Es una fachada clásica con un cierto realce pero sin muchas florituras. La calidad de la piedra fue un determinante grande en la conservación de los edificios. Tanto esta casona como la de los Sandovales adolecían de buenas piedras graníticas. Solo hace falta mirar el zócalo para comprobar lo que les estoy diciendo. El metal de la puerta se conserva en buen estado, así como la forja del ventanal que se cierra levemente, como si nos quisiera invitar a pasar a su interior.

La palabra dintel viene de lintel, del latín limitellus, que deriva de limen y limes. En latín, limen significa umbral, puerta, entrada o principio, y limes se refiere a un sendero entre dos campos, límite o muralla.

Sería y severa con pilastras adosadas a los muros y coronadas con pequeños detalles en forma de figuras geométricas piramidales, era esta una casa que me impresionaba tanto por la superficie que ocupaba, daba a tres calles como por la gran cantidad de dependencias que tenía: jardín, patio, estancias domésticas, parte más noble, cuadras, corrales, porches, granero, pajar. En una de sus fachadas, la de la calle Tercia, se abría a mitad de la pared un portichuelo que servía para introducir el grano y la paja.

Alcanzo a recordar esta casa al igual que otras siempre abiertas y era tal la decencia de las gentes, que pasaban por la calle, que la curiosidad no iba más allá de echar una ojeada a su interior, y en eso quedaba el asunto.

Poco antes de faltar Don Luis, mi abuelo se encontraba vendiendo unas 3.000 cabezas de ganado en Albacete. Para cuando quiso llegar al pueblo éste ya había fallecido. Por esa época a mi padre que jugaba por esos grandes corrales con el resto de sus amigos le pasó por encima de la oreja la rueda de una galera, pero de esto y de otras cosas, biblioteca de la casa, hablaré en su momento.

No me gusta de esta fotografía los remates que se han empleado para rehabilitar la fachada, el color ni la persiana superior del ventanal.

De todas formas agradecer al fotógrafo el haber enviado esta fotografía que nos sirve para definir ciertas peculiaridades del tejido urbano del pueblo. Su buen encuadre y remate nos advierte de que el fotógrafo se encontraba bien posicionado y con ganas de dejarnos esta fachada en el foro para disfrute de todos.

Otra fotografía de la misma casa:

 Nos saca el fotógrafo lo poco monumental que queda en el pueblo. Al mirar esta fotografía es como si el fotógrafo quisiera decirme mírala y dime. Es a lo visto una fotografía segmentada. Yo diría que mutilada. Pero nos sirve la fotografía para que hablemos de dos cosas: la primera del escudo heráldico que quiere vislumbrarse y no aparece y otra del color de su fondo..

Situada la fachada y la casa a mano derecha de la calle Melgarejo y casi enfrente de lo que fue la casa curato, hoy solar. Fue una gran casa y perteneció a D. Luis Belinchón Ruiz Zorrilla. De esta casa mi padre sabe mucho ya que mi abuelo allá por los años 20 del siglo XX era el hombre de confianza y en ella estuvo hasta que le vino la muerte a su dueño, Don Luis, gerente del Diario El Mundo: Diario Regionalista, y su mujer, Doña Luisa, dejó todo el patrimonio de Pinarejo en manos de un tal Abelardo, Pechitos, de Mota del Cuervo. Cuenta mi padre que cuando era pequeño pasó muchas horas y muchos días en brazos de esta señora ya que no tenían familia y en cierta medida se querían quedar con mi padre, cosa a la que no accedió mi abuela que con buen criterio dijo que el hijo lo había parido ella y era suyo.

Si vamos a las dos características a las que me había referido en un principio podemos comentar que en la fachada ha desaparecido el escudo heráldico que en ella estaba fijado y servía para honrar a sus huéspedes y para clarificar a los forasteros y resto de vecinos del pueblo quien era el que vivía en la casa y cual era su poderío. Ahora queda, en señal de homenaje, un clavo como queriendo decir soy testigo mudo de una historia, por favor no me preguntéis.

Siempre cuando se arranca un escudo surgen interrogantes. ¿Alguien que lo quiso colocar en otra fachada? ¿El deterioro de la piedra? ¿Avatares guerras y destrucción por parte del proletariado?. No lo sé. Lo que sí quiero decir es que bien estaba en la casa y bien vestía su entrada..

Como hay otra fotografía para comentar cargaremos el resto del tintero sobre la otra

José Vte. Navarro Rubio

SOLEDAD: CASA EN RUINAS

                                                         

En su conjunto esta fotografía es más armoniosa que la anterior denominada "vejez". El autor la denomina “Soledad”. No se si será porque le trasmite soledad o porque detrás de esa palabra tan significativa hay otras consideraciones que tienen que ver con su infancia y con la contemplación de ese paisaje que un día vio lleno de vida y hoy muerto. ¿Hay que ver como con el paso de los días y de los años las percepciones que se tienen de las cosas se deforman?

La fotografía está tomada desde la calle y en ella se ve en su totalidad la fachada de una casa que luego se subdividió en tres. Los todavía paredones indican esa separación a la que me he referido. Las viviendas son de aquellas que tenían patio anterior, después vivienda y por último la cuadra, el pajar y el corral. A mano derecha de la fotografía una puerta tapiada y una escalera derruida son mudos testigos de un pasado ya lejano en que sus moradores habitaron en ella.

En estos patios se solía pasar muchas horas al día. Allí las mujeres sembraban semillas en botes de aquellos grandes de tomate natural que luego germinaban y llenaban el lugar de olores irrepetibles. Allí se jugaba, se oía por la noche la radió, se bailaba y se trabajaba la flor del azafrán y también se les quitaba a la tortas de girasol las pipas a base de golpes pegados sobre la superficie de la torta. En las horas del día que daba el sol se colocaban calderetas de agua para que los rayos solares calentaran el agua que luego servía para lavarnos de arriba a abajo. Allí cuando llegaba la matazón se mataba el gorrino y allí también se depositaban las aceitunas en grandes montones antes de que partieran camino del molino de aceite, almácera.

Bueno para que continuar. Esto quien no lo ha probado no se lo puede imaginar. ¡Tampoco y tanto!

ESPERANZA

                                                                          

La fotografía tiene que ver con la parte trasera del mirador. Nuestro amigo el fotógrafo habla de esperanza. Pero yo añadiría y mucha fe y terminaría comentado ¡por caridad divina que no se caiga la estructura superior de tapial que se ve en la fotografía!. Es lo de siempre lo viejo y lo nuevo condensado en un mismo espacio. Cada cosa a su aire y como puede sobreviviendo a los fenómenos naturales, lluvias, nevada y al paso del tiempo.

Lo que más llama la atención de la fotografía es ese inmueble superior que parece haber sido desgajado de su estructura original y que parece querer enseñarnos su denudez más absoluta. Tres orificios en la pared bien orquestados daban a su propietario el derecho a una visión que solo el uso y las costumbres podían permitir.

CALLE DE LA DIVINA PASTORA

Si Divina fue la Pastora
el pastor a la zaga
no le debió andar
aunque por ser Divino
en la Iglesia en un altar está.

Recuerdo de aquella calle
Una pequeña cueva
y en ella una puerta
y en la puerta un ventanal
por donde los niños nos asomábamos
en busca de un fantasma
que por no verlo
supongo que nunca debió de estar.

Y junto a la cueva una senda estrecha
que nos llevaba una explanada
por la que subíamos y bajábamos sin parar
cuando al escondite de pequeños queríamos jugar.

Es una calle que si la subes
luego la tienes que bajar
por eso ni me viene ni me va,
si no fuera calle querida
que en mi alma
permanentemente morarás,
porque en ella vivieron mis abuelos,
que por el cielo ahora deben caminar.

Calle que con el Tesillo se topa
tiene mucho de que hablar
pues quien en el Tesillo se muere
directo a la gloria eterna
sín más historias y padrinos va.


Un árbol es fiel testigo de esa esperanza a la que se ha referido el fotógrafo. Árbol que como se ve se encuentra en sus primeros inviernos pero que a buen seguro que crecerá y será un elemento más de ese mirador.

No pregunto que buscaba el fotógrafo porque esta claro, buscaba aquello que le resultaba más entrañable y cotidiano. Aquello que seguro que quedó retenido en su retina hace muchos años y ahora le vuelve otra vez a aparecer como queriendo decirle ¡Sálvame de la que me viene encima!. Bueno, pues, por el momento, ha sido salvada aunque solo sea a nivel fotográfico

José Vte Navarro Rubio

VIA CRUCIS

                                                                       

Esta sacada la fotografía allí donde se bifurcan la calle de la Veguilla y la calle denominada del Pocillo. La verdad es que el corpus de cruces del Vía Crucis, conjunto de cruces, es variado y heterogéneo y más en esta calle donde las cruces se han tenido que acomodar al nuevo paisaje: unas sobre fachadas, otras sobre verjas, unas de piedra, otras de obra, otras de metal, en fin.

Esta cruz es indicativa de que el Vía Crucis pasa por esta calle camino de las eras. La cruz, que se ve en la fotografía, lucia más cuando la pared estaba de blanco. Ahora nos queda la Cruz a la espera de su día grande pero a la vez triste por todo lo que representa y tiene que ver con el martirio que padeció Nuestro Señor camino del Calvario. "Vía Crucis" latín de "Camino de la Cruz". También conocido como "Estaciones de la Cruz" y "Vía Dolorosa". Se trata de un camino de oración que busca adentrarnos en la meditación de la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo en su camino al Calvario. El camino se representa con una serie de imágenes de la Pasión o "Estaciones" correspondientes a incidentes particulares que Jesús sufrió por nuestra salvación.

Les dejo con tres versiones de esta 1ª estación y con una poesía relacionada con la calle:

I ESTACIÓN

El pretorio y casa de Pilatos
será la primera estación que andarás,
do verás que azotaron mi cuerpo
crueles verdugos hasta se cansar.
Sigueme y verás
que cobarde, sus manos lavando.
Pilatos sentencia de muerte rne dá

I ESTACIÓN
(Solista) El pretorio y casa de Pilatos
sean la primera estación que andéis;
y verás que azotaron mi cuerpo
seis fuertes verdugos con gran crueldad.
¡ Sigueme y verás que Pilatos
sentencia de muerte me dio
procurando al pueblo agradar!
(coro) Reina del cielo, estrella del mar
alcánzanos gracia para no pecar.

I ESTACIÓN
El pretorio y casa de Pilatos será la primera estación que andarás
y verás que azotaron mi cuerpo seis fuertes verdugos hasta se cansar.
SÍGUEME Y VERÁS
Que Pilatos sentencia de muerte me dio procurando a Cesar agradar.

DEL AUTOR DE PINAREJO EL MEJOR PUEBLO

Pasa por esa calle el Vía Crucis
camino de su primera estación
por eso se llama calle de las Cruces
y tienen que ver su nombre
esa es la intención
con el calvario que pasó Nuestro Señor
hasta llegar a su última estación.

Si volviera a nacer
por nada del mundo cambiaría de lugar
pues en esta calle me salieron los dientes
mientras mi madre me daba de mamar.

Cinco cruces tiene la calle
desde su principio hasta el final
y de tanto respeto que impone
solo con su nombre mencionar
cuesta en esta calle hasta respirar.

José Vte Navarro Rubio

A UN VIEJO ESCUDO HERÁLDICO Y POR TANTO SOLARIEGO


                                                                                
escudo de armas encalado en el que se ven las diferentes partes y motivos se encuentra ubicado en la casona de D. Jesús Olmedilla de la cual ya hemos comentado algunos aspectos en otros apartados de este foro. Sin entrar en mas de detalles tenemos que decir que el estado de conservación es notable y para que se versen un poco en el tema de heráldica les acompaño algunos pequeños detalles que tienen que ver con este mundo tan particular:

Francisco Piferrer, en su tratado sobre heráldica de 1858 definía como blasón “á las armas é insignias, ya emblemáticas, ya puramente convencionales, con que los nobles y los caballeros de la edad media adornaban sus escudos para recordar algún hecho heróico, algun dato ó acontecimiento notable

Para el caso peninsular, casi todos los escudos de armas nacen en la Reconquista. Las primeras armerías de las que se tiene noticia documental aparecen talladas en piedra a finales del románico y principios del gótico; fuera de estas piedras –balconajes, torreones, arcadas y sepulcros- pocos ejemplares existen con otro tipo de material de documentación anterior al reinado de los Reyes Católicos.

Según las formas en que el escudo aparezca dividido puede presentar estas características:

·Cortado: cuando se halla dividido en dos partes iguales por una línea horizontal.
·Partido: cuando aparezca dividido por una línea vertical.
·Tronchado y Trajado: el escudo está dividido por una línea diagonal; de izquierda a derecha y de derecha a izquierda, respectivamente.
·Terciado: el escudo se halla dividido por dos líneas verticales en tres partes iguales.
·Cuartelado: el escudo está dividido en cuatro partes iguales existiendo dos variantes; cuartelado normal y cuartelado en aspa
Los timbres son ciertos adornos que llevan exteriormente y ntribuyen a veces a identificar a la persona o linaje al que pertenece o determinar su jerarquía social:

·Corona, con una multitud de variantes; de duque, marqués, almirante...
·Yelmos
·Cimeras: “es una pieza heráldica que se pone sobre lo alto del yelmo”
·Lambrequines: adornos formados por hojas de acanto que, partiendo del casco, rodean el escudo.
·Tenantes y Soportes: figuras heráldicas que aparecen en los escudos en posición de sostenerlos por ambos flancos. Las figuras con rostro humano son tenantes y las figuras de animales o piezas arquitectónicas son los soportes.
Divisas o lemas: breve sentencia (normalmente en latín) que se coloca sobre el escudo debajo de él. Hay divisas en una familia o linaje y otras que adopta cada individuo.

José Vte. Navarro Rubio

                                                                    

Esta fotografía tiene que ver con otra anterior. Es la casa de D. Jesús Olmedilla vista desde la calle del Tesillo. Se aprecia el color blanco de la fachada y sobresaliendo en ella tres elementos imprescindibles las ventanas y las puertas y sobre su dintel una gran ventana con barandilla que se abre al exterior como si fuera un balcón, aunque a lo mejor no era esta su función. La fachada está realizada con materiales muy toscos tal y como se corresponde con una casa de labranza. Las ventanas dan la sensación de estar cerradas desde toda la vida. Y a lo mejor es así. Esta panorámica es más completa que la de la anterior fotografía ya que coge en un primer plano toda la fachada con sus diferentes elementos que aunque no sobresalientes son los originarios. Podemos decir que esta fachada esta tal y como la construyeron en su día.

SOBRIEDAD

                                                                   

¡Y tan sobria que es la iglesia! En esta fotografía se pueden resaltar diferentes aspectos que tienen que ver con la disposición espacial de cada una de las tres naves de la iglesia así como la ornamentación del altillo sobre el que la iglesia se alza. No recoge la fotografía todo el frontis y fachada ya que falta parte de UNO de sus cuerpos, así como la torre o campanario. No obstante y dada la dificultad que entraña el plasmar en una sola instantánea el conjunto de la fabrica de la iglesia nos podemos dar por satisfechos. Se acompaña a continuación una poesía de rima libre y sin añadidos florales:

A UNAS VIEJAS PIEDRAS
Se alza la iglesia parroquial de Pinarejo
y en su máxima plenitud y fortaleza
trasmitida a través de sus viejas piedras
permanece ahí inquietante y serena
siempre a la espera de esos momentos
en que el pueblo se viste de luto o de fiesta.

Y es el pueblo más que nunca
el que con el ir y venir
hasta tus mismas puertas
te da, iglesia, la fuerza necesaria
para que continúes siendo,
aun dentro de esas soledades eternas
que de noche se convierten en tu compañera,
la permanente y esbelta centinela
de este pueblo que tanto te respeta.

y el pueblo en respuesta vuelve
en los días de culto, de luto o de fiesta
a postrarse a tus pies, querida iglesia,
a sabiendas de lo que eres y representas.

José Vte. Navarro Rubio

ENJALBEGADO

                                                                      

La fotografía nos muestra una casa de Pinarejo a la que se han hecho diferentes añadidos que han respetado tanto la uniformidad del edificio como la de las diferentes plantas de las que este se compone. Notablemente llama la atención la blancura de la casa. Nuestro fotógrafo ha titulado la fotografía con el nombre de enjalbegada esta es la palabra que aquí se utilizaba para definir la acción de blanquear las casas ya fuera por dentro o por fuera. Tal y como expresé en un comentario a otra fotografía la palabra más adecuada es encalada simplemente por una cuestión y esta estriba en el tema de los áridos, si la mezcla es solo de agua y cal será pues encalado.

Agradable fotografía que nos devuelve a un ambiente ya perdido que va a ser muy difícil de recuperar. Lo blanco como tal tiende a desaparecer ya que los recubrimientos que ahora se colocan en las fachadas son más duraderos y la otra cuestión es por pura comodidad. Estas fachadas como la que vemos en la fotografía piden un mantenimiento continuo, ahora, allí donde esté una estructura antigua que se quite cualquiera de las modernas. Nuestros mayores construían de forma que el frío y el calor, ya fuera en invierno o en verano, no entraran dentro de las casas y para eso tenían que revestir las paredes de tal forma que hicieran de filtro, de ahí el grosor de las paredes y sus componentes. Nuestros mayores sabían lo que hacían y que el color blanco es el mejor repelente del calor.
José Vte. Navarro Rubio

DIVINA PASTORA

                                                               

Naturalmente que hay contrastes. Es una fotografía tomada desde la parte de arriba de la calle de la Divina Pastora y se ve el contraste entre tres tipos diferentes de edificaciones, cada una a su aire, y justo en mitad de la calle se alza, desde siempre, la única de las casas que puede darnos una idea de cómo la calle fue en su día.

Destaca en la parte más `profunda de la fotografía el pequeño mirador que el Ayuntamiento ha habilitado en el lugar aprovechándose para ello de un pequeño promontorio que había en el lugar.

En el saliente de la izquierda de la fotografía sobresale un trozo de lienzo de paredón que si cave viene a dar más contraste al conjunto de la fotografía y para rematar el comentario al fondo se divisa un poco el paisaje rural de nuestro pueblo. Este contraste que vemos en la fotografía es cada vez más normal en el pueblo. Llegará el momento en que todo será un contraste.

Les dejo con una poesía que viene al caso:

Si Divina fue la Pastora
el pastor a la zaga
no le debió andar
aunque por ser Divino
en la Iglesia en un altar está.

Recuerdo de aquella calle
Una pequeña cueva
y en ella una puerta
y en la puerta un ventanal
por donde los niños nos asomábamos
en busca de un fantasma
que por no verlo
supongo que nunca debió de estar.

Y junto a la cueva una senda estrecha
que nos llevaba una explanada
por la que subíamos y bajábamos sin parar
cuando al escondite de pequeños queríamos jugar.

Es una calle que si la subes
luego la tienes que bajar
por eso ni me viene ni me va,
si no fuera calle querida
que en mi alma
permanentemente morarás,
porque en ella vivieron mis abuelos,
que por el cielo ahora deben caminar.

Calle que con el Tesillo se topa
tiene mucho de que hablar
pues quien en el Tesillo se muere
directo a la gloria eterna,
sin más historias y padrinos, va.


José Vte Navarro Rubio

Es la calle de la Divina Pastora con un componente nuevo ese bastión de piedra que se eleva hasta su mirador donde surge una barandilla y una pequeña explanada desde la que poder disfrutar de unas buenas vistas del pueblo. Aquí en este lugar antiguamente había una cueva y un montículo. Debidamente adecentado la calle ha ganado mucho. Vemos como la cuesta se va abriendo y las casas de la derecha de la fotografía se van adaptando a la morfología del terreno.

GRACIAS FOTOGRAFO POR SER MI MUSA

Después de esta visión rápida del pueblo, a través del corpus fotográfico que nuestro amigo el fotógrafo nos ha brindado a los seguidores del foro, tengo que decir que quedo complacido a la espera de esa otra “tonga” de fotografías que pueden servir para ampliar nuestra memoria histórica.

Como es normal la contemplación de estas fotografías y sus comentarios habrán causado diferentes sensaciones. Justamente en esto radica la grandeza del asunto, en que cada fotografía pueda llegar a convertirse en una imagen fija de otros momentos ya vividos con anterioridad. Cómo me decía el otro día un amigo, paisano, -yo he corrido por esas calles ¡Y me trae tantas vivencias! -Bueno, pues si es así me alegro, y con ese poco me conformo. Creo que los que vais siguiendo el foro gozáis de la oportunidad de veros recogidos en alguno de los renglones en los que hablo contando historias del pueblo.

Cómo ya explique una vez ¡Qué lastima! Haber perdido ese caudal de memoria histórica que representaba el conocimiento de nuestros mayores con hechos y anécdotas que se podían remontar hasta mediados del siglo XIX. ¿Os imagináis lo bonito e interesante que sería recuperar esa parte del folclore y de la cultura popular que por desgracia yacerá para siempre en el baúl de los recuerdos?. Una pena y grande, pero que vamos hacer.

Por mi parte sólo queda, ya veis el interés que me mueve, continuar, indagando y sacando datos. En este sentido tengo que decir que todo lo que cuento y os empapáis es producto de trabajo cotidiano de este, yo, que escribe bajo el seudónimo: “Pinarejo el mejor pueblo” o “ del autor de Pinarejo el mejor pueblo”. En este empeño que estoy continuaré fabricando textos porque mi fábrica de datos está en mi cabeza y en los documentos que tengo archivados y que me sirven para escribir lo que yo entiendo que el pueblo quiere.

Poco a poco voy quemando etapas en estos momentos, en lo que se refiere a poesía, me queda solo una calle por comentar, poetizar, y los callejones (en su conjunto) Después, quizás comience con determinadas partidas del pueblo.

Hay alguien muy interesado en el foro que me invita a que me calle. A este personaje yo le digo: Caminante no hay camino....., y añado: Hijo, tú, a lo tuyo, que yo no entraré en tus temas.

José Vte Navarro Rubio

CRUCE DE CALLES: CANTARRANAS DIVINA PASTORA Y F. OLMEDILLA

                                                                           

Recoge esta fotografía el rompiente entre dos calles ¿Creo que está equivocado el título que se le ha puesto de calle de Cantarranas? Una es la calle de la Divina Pastora que es la que surge a mano izquierda y la otra es la de D. Federico  Olmedilla que en su tramo final enlaza con la Calle de Santa Ana. Como siempre es la singularidad de la fotografía lo que llama la atención reconvirtiendo algo que en sí no tendría más importancia en una fotografía singular. Tanto de una y de otra calle ya hemos escrito en su momento con motivo de otras fotografías, no obstante hay que hacer especial mención en algo que yo creo que es primordial para entender la trama urbana de nuestro pueblo, me refiero concretamente al buen aprovechamiento que se ha hecho de los diferentes espacios para crear un circuito de calles y de edificaciones totalmente incorporadas al medio natural.

CALLE DE D. FEDERICO OLMEDILLA
Sin avisar y a tientas
como si fuera un rumor leve del agua
al acercarse a las playas
para acariciar las mejillas de la arena
la muerte llega y se lleva
vestida para la ocasión con velo y agria sonrisa
la vida
que se esfuma
convertida en celeste luz apurada
y en llama de candil que se va apagando día a día
hasta caer en la oclusión.

Una mano de textura tangible y áspera
que vaga por los rincones sombríos
de las llanuras sin luz
corta las ansias de vivir
de un cuerpo y su alma
amarrados a un fatal destino
a la hora en que los pájaros nocturnos,
otean en las sombras
desde las ramas de las oliveras,
a la espera de caer sobre sus presas
que por desconocer no saben
lo que hay más allá del lindero
donde apaciblemente duermen
desde tiempos inmemoriales.

En una noche ligera y sin luna
sombras vestidas con un espeso plumaje negro
como el carbón de una mina
tocan en las puertas y llaman
al hombre que quiso a su pueblo
y se lo llevan como si jugaran al escondite
hacia las verdes praderas de la Veguilla
allí donde la tenue hierba le espera
para que le de un beso de despedida.

A la espera, siempre a la espera,
se alza la calle imponente para decir
“Aquí nació y vivió D. Federico Olmedilla García,
Hijo Predilecto de Pinarejo, con él os dejo.

José Vte. Navarro Rubio

LA ERMITA Y EL MERENDERO

                                                                  

La verdad sea dicha es que Pinarejo por no tener no tenía ermita con independencia de que en La Nava hubiera en su día una ermita bajo la advocación de San Andrés. Aquí en la era del Molino la ermita queda bastante bien y además está a un paso del pueblo. Es un lujo poder disfrutar de una ermita nueva y además construida dentro de un contexto tan agradable. En la fotografía tenemos la posibilidad de disfrutar de ella en su totalidad Coge la fotografía parte de un lateral de la ermita y parte de la fachada principal y como marco más lejano aparecen los campos situados detrás mismo de la ermita.




Esta fotografía aunque un poco oscura yo la titularía: postal del Molino. Es una fotografía de postal. Ya saben si suben al molino fíjense bien y disparen desde esta posición. A parte de la ermita que no se puede recoger en la instantánea aparecen casi el resto de detalles que son propios de esa era y de ese molino que tan decentemente se han arreglado y se han convertido en uno de los lugares, sitios, más bonitos de Pinarejo.

Al igual que ocurre con la otra fotografía sacada desde el Mirador de la calle de la Divina Pastora si no fuera porque la fotografía está asociada en el Foro a Pinarejo muchos dudarían que fuera una foto de nuestro molino y de nuestro pueblo.

En la fotografía se puede apreciar el propio Molino, unos bancos, el césped, una farola, la barbacoa y la pérgola. Se han hecho bastantes obras de acondicionamiento del Molino que han servido para vestirlo adecentarlo y ponerlo al servicio del pueblo.

Como le estoy diciendo si vas por el pueblo no dejes de pasarte por el Molino y hazte unas fotografías porque realmente vale la pena.

100 años de historia se cambian en un segundo. En este caso para mejor el entorno y dar al lugar utilidad y prestancia.


                                                                        

Entre otras cosas permítanme que exclame: ¡sí, señor!. Primero por una cuestión muy clara y es que la fotografía es preciosa y segunda por el ingenio, ya me he cansado de decirlo, de nuestro fotógrafo, que nos une en una misma fotografía el pueblo con el Parque del Molino. Y además lo hace colocando la maquina de fotografiar y lanzando la instantánea desde el único lugar desde el cual se podía sacar esta fotografía. La fotografía se eleva por encima de la barandilla y nos sirve una parte del pueblo y su iglesia parroquial. Pero lo hace como si se hubiera producido un milagro y la iglesia, todo su edificio, hubiera dicho amigos y amigas me traslado cerca del Molino haber si allí hace mejores vientos.

Me alegra que esta fotografía esté en el foro y que los que entran en él, aunque solo sea de forma silenciosa, puedan en casa deleitarse con la vista de su pueblo, Pinarejo, desde un lugar inverosímil. Una barandilla y una instantánea apropiada funden, como si se estuvieran dando un abrazo, al parque del Molino con Pinarejo.

Presten atención y comprueben como las panorámicas fotográficas del pueblo van incrementándose en función de los nuevos elementos arquitectónicos y del nuevo mobiliario urbano que va apareciendo en diferentes lugares de nuestro casco urbano de Pinarejo y extrarradios.

José Vte. Navarro Rubio
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...