Viene el día a acabar
en estos momentos
en que uno se sienta
para descansar
y pensar lo que ha hecho
a lo largo de todo el día.
Viene uno cansado de leer
malas noticias
y de pensar cada vez más
que el futuro es cada vez más negro
por culpa de este capitalismo cruel
que se acuesta y se alza al nuevo día
con la misma música.
Viene uno de pelear y de contemplar
con una cierta atonía
que no es ciudadano Europeo
y que puede perder sus derechos como tal
por el simple hecho
de que se produzca un vaivén en la bolsa.
Viene uno hastiado y preocupado
y no quiere compartir con su familia
tanta desazón y tanto nerviosismo
y se va a la cama
con su triste melodía
de soldado caído en combate
sin haber ido a la lucha.
Viene uno a dormirse
cuando el cerebro deja de pegarle vueltas
a estos asuntos de economía domestica
y enciendes la luz de un lamparilla
y contemplas que los primeros rayos de luz
llegan hasta allí donde descansas.
Viene uno de otras épocas y de otro mundo
no tan mediático
y siente vergüenza ajena
de ver a esos grandes hombres de estado
manejar las cuentas
como quién hace una queimada en una verbena
Viene uno sin querer
y se va hastiado de ver
que el capitalismo es el problema
y el socialismo bien entendido ya no existe.
Autor: José Vte. Navarro Rubio
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