Son con las viejas historias
y con los cuentos chinos
con los que a veces me voy de viaje
por esos viejos caminos
de las tierras de cualquier lugar o sitio.
Una puesta de sol junto a un río,
el canto cansino de un grillo,
el aleteo virtuoso de una mosca
o la picada jodida de un mosquito,
todo forma parte de ese entorno
en el cual me muevo y disfruto.
Con poco se renueva el espíritu,
con poco me voy por esos caminos
y ya de retorno me traigo
en ese macuto que llevo conmigo
aires, calores y fríos
que forman parte de mi pequeño mundo.
De la tierra al cielo solo hay un camino,
se llama muerte
y nadie lo quiere andar
pues no tiene retorno alguno.
Peregrino en busca de un Dios desconocido
sube las cuestas y duerme
allí donde las corrientes de los ríos
suenan a arrullos.
Autor: José Vte. Navarro Rubio
y con los cuentos chinos
con los que a veces me voy de viaje
por esos viejos caminos
de las tierras de cualquier lugar o sitio.
Una puesta de sol junto a un río,
el canto cansino de un grillo,
el aleteo virtuoso de una mosca
o la picada jodida de un mosquito,
todo forma parte de ese entorno
en el cual me muevo y disfruto.
Con poco se renueva el espíritu,
con poco me voy por esos caminos
y ya de retorno me traigo
en ese macuto que llevo conmigo
aires, calores y fríos
que forman parte de mi pequeño mundo.
De la tierra al cielo solo hay un camino,
se llama muerte
y nadie lo quiere andar
pues no tiene retorno alguno.
Peregrino en busca de un Dios desconocido
sube las cuestas y duerme
allí donde las corrientes de los ríos
suenan a arrullos.
Autor: José Vte. Navarro Rubio
No hay comentarios :
Publicar un comentario