Llueve,
lunes y vacía la playa,
voy por el paseo
mojándome la cara,
Perseo también se mojaba
mientras Homero que era ciego
componía historias que alguien le contaba
y que el encerraba
en un caballo de madera que comía espadas, hombres y lanzas
con sus cascos, escudos, armaduras y gorros con plumas de aves extrañas.
Llueve
y me mojo
¡que pasada!
expresión esta que significa que buena es el agua y que bien me viene en esta mañana.
Llueve y unos niños cantan
una canción que les ha enseñado su madre
de cuando ella era niña
y también se mojaba con diferentes aguas.
Llueve y los bancos vacíos me alarman
pues siempre los vi llenos
de ancianos que se contaban las canas,
de enamorados cogidos de las manos con una pasión rara
y de seres humanos de diferentes culturas no haciendo nada más que sentir la paz en sus almas.
Autor: José Vte. Navarro Rubio
No hay comentarios :
Publicar un comentario