Roban los banqueros
porque es navidad
y tienen el árbol que adornar
con permanentes, pólizas e hipotecas que servirán
para arruinar la vida de más de un mortal.
Son ladrones de alta escuela
muy difíciles de pillar
pues saben que para ellos no esta hecho
nuestro maltrecho código penal.
Entre ladrones, sin más,
Jesucristo fue crucificado
sin piedad
pero ninguno de ellos
ni Gestas ni Dimas, ni Barrabás,
darían ahora que hablar
pues los hay más finos
que la porcelana Made in Taiwan,
ya sean estos
miembros de los consejos de dirección de las cajas, bancos o montes de piedad.
A los ladrones de caballos
en el Oeste Americano se les solía colgar,
será por eso que en España
arden los bosques a la mínima oportunidad
no fuera el caso que hubiera que utilizar
el mismo remedio que Lafuente Estefanía
solía usar
en sus novelas de divulgación popular
con las que media España aprendió a leer
en la época de la autarquía Militar.
Viva la España de las libertades
esa que se mantiene al margen
de todo lo malo que nos puede pasar
y viva la Constitución
en la que se tienen que reformar por higiene mental,
alguno de sus artículos
que tanto están dando que hablar.
Autor: José Vte. Navarro Rubio
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