Y, como si fuera
una vuelta de nuevo a los orígenes,
en eso está mi ánimo,
me retuerzo en el sillón desde el cual dirijo mis pasos
y me pongo de inmediato
a ejercer ese oficio
de librepensador crítico
que consiste en escribir
de todo aquello de lo cual se puede opinar por ser barato.
Todo pasa
y todo deja rastro,
desde la sonrisa que uno ha visto
en la cara de un niño al ver un payaso
a las carcajadas limpias de polvo y barro
de unos ancianos
al ver a sus nietos en un parque jugando.
Dicen de la vida
que pasa volando,
tan rápido
que no da tiempo
a otra cosa que no sea
estar siempre caminando
queriendo o sin querer,
igual da al final y a cabo,
pues algo hay que hacer y en eso estamos.
Autor: José Vte. Navarro Rubio
No hay comentarios :
Publicar un comentario