sábado, 19 de septiembre de 2015

POESÍA: 10 ESTAMPAS DE PINAREJO (7)

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SÉPTIMA ESTAMPA
Un día,
ya lejos,
de Pinarejo
saliendo
camino
casi del destierro,
huyendo
no del pueblo
sino de todo aquello
que en España llevaba siglos
de ello
sometiendo
a los campesinos
a los caprichos
de quienes se creían dueños
y señores
por el simple hecho,
todo causal
como aquí les cuento.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

POESÍA: ESTAMPAS DE PINAREJO (6)


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SEXTA ESTAMPA
Un entierro,
el negro
del luto,
el negro
de la tarde cayendo,
el negro
de los campos
también en su duelo,
el negro
que reviste
las campanas
que suenan entre lamentos.
Negro
en las calles
camino del cementerio,
duelo
en el pueblo
cuando un vecino muere
y se oyen lamentos

Autor: Jose Vte. Navarro Rubio

POESÍA: 10 ESTAMPAS DE PINAREJO (5)

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QUINTA ESTAMPA
La de un molino revestido
de aquello
que le faltaba
en el recuerdo
de todos los pinarejeros.
El molino
de los vientos
él tan quieto
en la sobriedad
de quienes se arremolinan entorno a su cuerpo
para sentirse unidos
al igual que aquellos
que desde siempre vivieron
comiendo
de los mismos alimentos
y sufriendo
de los mismos avatares en todos los tiempos.

Autor de la poesía: Jose Vte Navarro Rubio

POESÍA: 10 ESTAMPAS DE PINAREJO (4)

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CUARTA ESTAMPA
El calor
como queriendo
vivir en los cuerpos
decir a los vientos
del mundo entero
que allí en Pinarejo
ya sea en los llanos o en los cerros
el tiene de continuo su campamento
para los veranos de siega,
para las primaveras de ababoles tiernos,
para las fiestas, para los momentos,
en que en las eras
unas trillas y unos labriegos
navegan en los mares abiertos
de granos convertidos en la superficie de un gran océano de ensueño.

Autor de la poesía: Jose Vte Navarro Rubio

POESÍA: 10 ESTAMPAS DE PINAREJO (3)


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TERCERA ESTAMPA
La lluvia
cayendo
lentamente
y luego el sol reluciendo.
La lluvia brava
alimento de los muertos
acompañada de gritos etéreos,
relámpagos y truenos
en un negro firmamento.
La lluvia
bajando por las calles
jugando en los campos de avenas, trigos y centenos
con los tallos y semillas
con las cabezas al viento
de los granos verdes en las espigas durmiendo en sus altos lechos.
La lluvia y la cal,
y el cruel lamento
en que las dos se visten del mismo duelo
y se bajan en procesión de lloros y lamentos
paredes abajo
hasta el suelo.

Autor: Jose Vte. Navarro Rubio

POESÍA: 10 ESTAMPAS DE PINAREJO (2)


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SEGUNDA ESTAMPA
La nieve que es mi cuerpo
viviendo
ta y como viven los recuerdos
arropados
tan adentro
que a veces
se van ellos
los siempre alegre recuerdos
tras el blancor de los campos
y los paisajes tiernos
en que el hielo
cuelga de los techos
de aquellas cámaras en las que habitan
tantos y tantos personajes de nuestras leyendas y cuentos
que todavía se me van los ojos
tras las ventanas que se abren en las paredes de los caserones vacíos
en los que dicen que duermen ellos.

Autor: Jose Vte Navarro Rubio

POESÍA: 10 ESTAMPAS DE PINAREJO (1)

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PRIMERA ESTAMPA
El aire frío
que no el viento,
el aire recorriendo
los tejados,
los techos,
cuadras
y corrales,
patios
ya vacíos
con helechos.
El frío
en las noches de los inviernos
recorriendo el cuerpo
en aquellas camas
de somieres viejos
en las que los cuerpos
descansaban de sus encuentros
con la dureza de los días
que cada uno de nosotros llevábamos tal y como nos pedía el Dios que vigila lo que hacemos

Autor: Jose Vte Navarro Rubio

viernes, 18 de septiembre de 2015

POESÍA: DEL POETA QUE ESCANCIABA EN SANTA MARÍA DEL CAMPOS RUS VERSOS

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En su gloria quedó el muerto
y en su infierno el pueblo
en el que el poeta escribió sus últimos versos.
Fue,
trajo un viento, escanciado
con racimos de uvas de los majuelos,
aires de los desiertos
que en las vegas cerca de por donde un camino lleva a tejares de viejos cubos en tierras de pastoreo
se convirtieron
en nubes cenicientas en un rojo cielo sangriento.
¡Que quieto el pueblo!
en La Mancha, su corazón de remordimientos lleno,
vivió
desde aquellos momentos
su historia, sus cuentos, sus leyendas y crónicas
en las que se recuerda al mundo entero
que allí murió el poeta
después de pasar por un Castillo lleno de resentimientos
con sus tropas y ganados camino de su campamento
en una guerra a punto de acabar
como un clavo en una viga del techo
sufriendo de ese vértigo
que es el saber lo poco que vale la vida cuando hay desacuerdos.

Autor: Jose Vte. Navarro Rubio

POESÍA: JORGE MANRIQUE POETA QUE EN SANTA MARÍA CONSTRUYÓ SUS MEJORES VERSOS

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En aquel frío campamento,
en aquel pueblo,
a lo lejos
un pequeño riachuelo,
molinos de viento,
aspas recorriendo
el espacio concreto
de unos pelados cerros
escribe el poeta,
Jorge Manrique,
sus versos.
Paisajes oscos,
labriegos acarreando la mies, moliendo,
sus vidas
entre eternos sufrimientos
que el poeta hace suyos
entre recuerdos
de su padre muerto.

Manda en todo ello
la palabra del noble
atento
a la muerte que se acerca
por aquellos terrenos
de noches eternas con sus cuervos
de alas entorno al cuerpo
del guerrero
que a caballo y blandiendo
espada de afilado acero
va de pueblo en pueblo
imponiendo el superior criterio
de aquella reina que puso tanto genio
en extender su reino.

Autor de la poesía: Jose Vte. Navarro Rubio


POESÍA: " OH MUNDO, PUES QUE NOS MATAS



















¿Y por qué muero?

¿Y de qué me lamento?

¿Y por qué de lo mió
sujeto a este hierro,
espada, coraza, guerrero?

No hay muerte sin lamento
la del hijo por el padre
la del padre en el cielo,
la de la amada perdiendo
lo que la sostiene en vida, esperando su regreso.

Y el muerto
ya su cuerpo lavado
perfumado con los besos
de las mujeres que paren, con dolores inmensos,
hijos que por aquellos tiempos
eran como el humo algo que desaparece una vez las brasas muertas, en el cielo.

Las campanas tocaron
solo saben de ello, toques de muerte
entre rezos,
cánticos de los frailes
y en ello:
en un jubón, un verso: “Oh mundo, pues que nos matas"
y un pueblo
Santa María, esperando un milagro del cielo.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

POESÍA: DE AQUEL JORGE MANRIQUE EN SANTA MARÍA DEL CAMPO RUS MURIENDO

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Y le dio
tiempo
en su morir
lejos
de todo aquello
que le ayudaba a construir sus versos
a pensar
en lo que dejaba,
simiente abonada con estiércol,
fértil alimento
y lo que se quedaba
tendido a la solana, aguacero,
en un terreno
tan hecho
a llenar de tumbas
los cementerios.

Tuvo tiempo
en su caminar entre llanos y cerros
de ver la luna
de entender algo más, tal lo cuento,
de lo que el escribía
lleno de amor sincero.

La muerte,
lamento,
sufrimiento
del que vive
y en ello
la muerte, era su vida,
transcurriendo
desde La Nava,
por aquellos cerros,
al fondo
El Pinarejo
y más lejos
río que no viaja por su lecho,
Rus,
Santa María,
campo lleno
de hombres recios
vagando en su desespero
y a tientas recorriendo
paisajes que por de siempre quedaran señalados con el dedo
por haber sido
lugar en el que murió Jorge Manrique, en un día, noche, de sereno cielo.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

POESIA: POTATO ROOT

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Potato root
raíz
que crece en el subsuelo
hondo abismo
en el interior
de un cuerpo
el de la madre tierra,
el del padre trueno,
el del hijo viento
sobre el surco
removiendo los cabellos
del tallo,
del grano,
del fruto,
de los sentimientos
caídos
en días de grandes sufrimientos
desde el corazón
de todos aquellos
que hicieron con sus vidas
un eterno duelo
sin más entierros
que el que produce el azadón
cuando penetra en el suelo.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio


POESÍA: DE LOS GOBIERNOS CON CORAZONES DE HIELO

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Me interesa el eco,
el estruendo,
golpe,
ruido certero
de las botas
zapatillas de tela,
cuero,
sobre el silencio
de la noche
amiga
que vive en ellos,
los pobres sin refugio,
huyendo
de esa guerra
que en ellos
es
al igual que el frío hielo,
trozos grandes de icebergs
rompiendo
la superficie de sus sueños.
Buscan soluciones
carajo con ellos
que pierden el tiempo
estos malditos gobiernos
en justificar
sus políticas copiadas
de aquellas que nos helaron en otros momentos.

Autor: José Vicente Navarro Rubio

POESÍA: EN SU MEJOR PRIMAVERA CRECIÓ UN POEMA TIERNO

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La poesía es esto
el grito
si me apuran
el desespero
la última palabra de un verso:
te quiero;
el comienzo
al encuentro
de lo que sabemos,
intuimos,
bebemos,
agua, rocío, lagrimas del cielo,
en ese momento,
chasquido, estruendo
en la vida de un poeta,
corazón tierno,
sarmiento crujiendo
en la hoguera
que son los pensamientos
de quienes al tiempo se vuelven
como las hojas de un trébol
en su mejor primavera tiernos.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

jueves, 17 de septiembre de 2015

POESÍA: SE TOMAN MEDIDAS A QUIEN LE HAGAN FALTA



Ni entran ni vienen ni caben,
juegan las palabras
a lo que saben
desde el momento en que por la boca salen.

Azucarillos de azúcar
con los que endulzar el graznate,
miel de romero,
sal y vinagre.

Todo comienza
cuando se ve el sol radiante
por el cielo
trasponer alejándose del levante.

Tranquila la espera
no me da miedo lo que la gente piense
los años dan para lavar las ofensas
con ese coraje que espanta a quien se pone por delante.

A lo que se creía
la razón le faltaba
al guiso sin sal
algo le falla.

No se termina
lo que no se comienza
por algo se dice
que hay que tener paciencia.

Aturrulla el aire
cuando pasa
veloz
lamiendo la puerta de tu casa.

Gemía la noche
en su espuerta de paja
tapada con humo
y es que la oscuridad espanta.

A lo visto la razón le falta
tanta
que si en ello piensas
te preguntas ¿qué pasa?

Todo termina
aquí acaba
lo que comienza siendo un juego
y se convierte en un montón de preguntas sin respuestas adecuadas.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

miércoles, 16 de septiembre de 2015

POESÍA: EUROPA SE PARTE


















Europa
una mierda grande,
espectáculo el suyo
muy lamentable
para con esas gentes,
pobres de todas las partes
que se acercan
como unos buenos hijos a su madre
a los solos fines de asegurarse
una vida más estable
en el Continente
en el cual nacen
parte de los males
que afectan al mundo del cual proceden tantos y tantos refugiados y emigrantes
que no habrá alambradas suficientes
para cerrar las fronteras
a esos seres inocentes
que nos vienen
sin más Norte,
huyendo de la muerte.

Autor: José Vicente Navarro Rubio

POESÍA: DEL OLOR DE ALGUNAS FLORES


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Me trajo la tarde
ramilletes de flores
que uno coge
allí donde
estas nacen
al borde
de donde crecen
los barrios con sus pobres.
No saben las flores
el olor que desprenden
se sienten
en manos de quienes se quieren
juguetes,
a lo sumo, algunas veces,
despiertan admiraciones
que se desvanecen
para cuando se ponen mustias
y envejecen
en tan poco tiempo
que del nacimiento a la muerte
el trecho es tan pequeño que se recorre
siempre mirando hacia el presente.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

MALA RODRIGUEZ: A JIERRO



Ven mira lo que hago como lo hago
como te saco, como te cato,
como me gano el saldo,
como me salgo, como lleno mi saco,
te pongo a caldo sin calco
sin tacto... a jierro (x2)
no me digas, quieres y no puedes?
mucho lirili y mu poco lerele?
que se te consumen las velas
a la vejez viruela,
y viejas q no prenden
que ardan candelas
aprende a mover tu manivela,
que lo malo se sabe, si!
pero na bueno se pega
a que esperas, que mas?, que te kemas!
y mientras arde tu culo yo compongo temas
que la girvia tiene tela, te tiene en vela,
tiene carrera, bombos, platillos y trompetas,
asi te fundes como cacharros de la feria,
a mi no hay mandanga de ponerme una pega,
porque pase lo que pase tengo un par de imicatevas,
y estoy rodea de perros y perras,
hoy por hoy por maestra mi nombre me dan escuela,
y estoy en el paro, con tu curriculum de mierda
ven mira lo que hago como lo hago
como te saco, como te cato,
como me gano el saldo,
como me salgo, como lleno mi saco,
te pongo a caldo sin calco
sin tacto... a jierro (x2)

Pares y nones, gano siempre aunque te irrites
centro y marco goles, y no hay arbitruchos que me piten
pilla deleite, que la banda grite!,
y si tu bolsillo te lo permite disfruta de la elite,
si te pica te arrascas, que las dignas hacen piques,
y si usted no entiende calle shhh medite,
y es que ya cualquiera saca tiket,
pero no cualquiera aprecia ni sabe como se exprime,
y si quieres premio, pilla del jierro,
envio sueños a duro puleño,
de la que cuando ajoga el micro derrocha genio
y da paso firme sin que vaya, adonde la lleve el viento
porque sabe a quien quiere y a quien debe respeto,
porque sabe que tiene, pa to lo que quieras tiempo
juego con eso, ni con el pan ni el dinero
tu mientras botas al son, que te marca mi tempo
ven mira lo que hago como lo hago
como te saco, como te cato,
como me gano el saldo,
como me salgo, como lleno mi saco,
te pongo a caldo sin calco
sin tacto... a jierro (x2)
Oye! siempre! claras conversaciones!
asi triunfo yo en toas mi excursiones!
me dejo caer, me dejo querer,
y escucho, olés!
de batallones de fieras que piden emociones!
accion es lo que doy a base de empujones!
a cambio de bolsones, montones de jierro en secciones!
bajones de tensiones, subida de escalones!
limpias operaciones, impongo las condiciones!
dejando a los listorros chitones shhh
marcando el paso con pisotones,
tirando pa la familia porque la sangre me da tirones!
a mi la gente transparente que no quiero puñalones!!
ni busconas!, ni buscones!
ni sin sabores, ni dudas que me den sudores!,
solo juerga en buenos salones!
llevarme los galones, ah! y que me recen oraciones!
que voy de to por to! que no me falta ni un detalle!
mantengo el estatus aqui!, desde la calle!
controlando roles, escalando posiciones
que el tiempo es oro! y rolex son amores,
cambia la situacion pero no las atracciones,
no canbia la sensacion, solo las pulsaciones,
sacandole jugo a todas mis extracciones,
siempre buenos resultaos, siempre buenas actuaciones.
ven mira lo que hago como lo hago
como te saco, como te cato,
como me gano el saldo,
como me salgo, como lleno mi saco,
te pongo a caldo sin calco
sin tacto... a jierro (x2)

POESÍA: SOBRE LOS NÚMEROS NO PRIMOS


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Los que viven conmigo
él y ellas
no hacen falta
más cuentas
para saber donde está la familia
y los que estando fuera de ella
se suman a la encuesta
dando un montante total
igual a la potencia de dos
sin más restas
que la de los números no primos
que por creerse dotados de indulgencias
tocan a tu puerta
a la vez que lanzan piedras a ciegas.
La vida está llena
de emociones
que llevan
hasta allí donde uno quiere
Dios quiera
que el río de aguas turbulentas
que a veces nos arrastra
no se lleve por delante nuestras paciencias.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

martes, 15 de septiembre de 2015

JULIAN GARCIA DE SANTA MARIA DEL CAMPO RUS Y SUS PAELLAS, ENTRE ELLAS LA MEJOR DEL MUNDO




Un día después de ganar el concurso, Julián García volvió ayer al restaurante La Albufera de La Moraleja donde sirve cada día 130 raciones –unas 300 los fines de semana– a 19 euros la ración.

EVA MELERO | SUECA ­
Al pie del cañón. Así pasó Julián García el día después de haber ganado el 55 Concurs Internacional de Paella Valenciana de Sueca. Tras haber recibido el domingo el reconocimiento a «la mejor paella del mundo», el jefe de cocina del Restaurante La Albufera de Madrid se las vio y se las deseó para simultanear sus obligaciones y atender a los numerosos medios de comunicación que deseaban entrevistarle. «Esta mañana, en el trayecto de Cuenca a Madrid para ir a trabajar, si no he atendido a quince emisoras no he atendido a ninguna», comentaba. «He llegado y ya me estaba esperando la televisión autonómica de Castilla-la Mancha, he hecho una paella para ellos y luego otra para la televisión de Madrid».

Este experimentado cocinero, de 58 años de edad y natural de Santa María del Campo Rus (Cuenca), se dedica desde hace casi 40 años a la especialidad culinaria de los arroces. En 2013 ya demostró su manejo en la elaboración del plato valenciano por excelencia al obtener el preciado galardón en Sueca. En aquella ocasión, representaba a La Posada de Santa María, un establecimiento que regenta junto a su hija en la localidad conquense. Este año repitió el triunfo con La Albufera de La Moraleja, ubicado en esta exclusiva urbanización de Alcobendas donde residen conocidos futbolistas y artistas, y donde trabaja desde hace más de veinte años. El establecimiento está dedicado a la cocina mediterránea y ofrecen una variedad de 17 clases de arroces.

Julián García suele servir en el restaurante madrileño 120 o 130 raciones de paella valenciana al día. «Los fines de semana, como vienen familias aumenta la demanda, y podemos llegar a las 200 o 300 cada día», dice. El establecimiento cuenta con un perfil de cliente de clase media-alta, y el precio de la ración está alrededor de 19 euros.

De momento, confiesa que todavía no ha notado el triunfo en el concurso gastronómico en cuanto a incremento de público. «Hoy ha venido la clientela habitual, porque entre semana los clientes que tenemos son personal de empresa, y el fin de semana es cuando se diversifica más el tipo de cliente, y sobre todo vienen en familia», explicó. Aunque, eso sí, el lunes la paella valenciana fue el plato más demandado de la carta. «Algunos se han interesado por el premio y han elegido paella valenciana en lugar de otro arroz con marisco u otro tipo de paella», dijo el cocinero.

El diploma ya luce en el restaurante. «Le hemos buscado un lugar especial donde exhibirlo con orgullo porque aquí viene mucha gente interesada en comer paella valenciana y ahora ya tenemos un reconocimiento que avala que ofrecemos un plato de calidad», subraya.

Las paellas en Santa María
tienen una gracia especial
si se comen en su Posada
y tal como mandado está
las hace Julian
que en eso de cocinar
lleva por título,
que nadie le puede quitar,
el de ser 
¡que don tan especial!
el mejor cocinero
en eso de aviar 
la paella valenciana
con esa gracia singular
de quien nacido en La Mancha
ha venido a colocar
una pica
en Sueca, la capital,
de las paellas a escala mundial.
Si a La Posada vas
recuerda peregrino que has de probar
las paella valencianas que prepara Julian.

Autor de la poesía: Jose Vicente Navarro Rubio 

lunes, 14 de septiembre de 2015

POESÍA: DEL AMOR Y UNAS EXTRAÑAS TEORÍAS

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No estamos preparados para predicar
aquello que consumimos
el amor
la chispa
dicen que de la vida.
Si el amor fuera
la cumbre más alta
de una montaña alpina
quizás su conquista
estaría a la mano  de algún arriesgado alpinista,
pero no,
que quieren que les diga,
el amor, como tal, como chispa,
dicen que vive, dicen que respira,
dicen que se mueve, dicen que anida,
en los nidos que hacen las golondrinas
cuando llegan después de largas travesías
para dar nuevas vidas
allí donde encuentran la paz necesaria para alimentar a sus pequeñas crías.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

POESÍA: DE UNAS FIESTAS QUE SE ACABAN EN PINAREJO, SANTA AGUEDA



Se acaban las fiestas
y vuelve
el silencio de las casas
a vivir con uno
en mitad de esas tormentas del alma
que todo lo quieren
y de la tierra que se embriaga
de las pasiones de los seres humanos
sobretodo de los que más le falta
el calor de las lumbres
que se siente en las frías estancias
donde los hombres meditan
y la mujeres calladas,
embelesadas en sus rutinas necesarias,
beben en los ojos de sus hijos
la fuerza que les falta
para llevar el día a día
dentro de una normalidad que espanta.

Santa Agueda
perdida en la retina
de una calle empedrada
a hombros de sus hijos e hijas más estimadas
en un septiembre que se cansa
de oír tocar las campanas
entre baladas de las ovejas
en sus corrales ya aposentadas
para pasar la noche
y estirar las patas.

Música que sube
tras una puerta con olores a vino y limonada
y en el fondo
como salida de la nada
una acordeón que toca pasodobles que se bailan
con ese salero propio de quienes saben que mañana
en el campo espera una agotadora jornada.

Autor: Jose Vte. Navarro Rubio

DE AQUELLOS NUESTROS SOLDADOS DE PINAREJO, ENTRE ELLOS LOS DE ULTRAMAR, TODOS ANTERIORES A 1932






DIARIOS OFICIALES DEL MINISTERIO DE GUERRA:

12/06/1923:

Se concede una pensión de 431 pesetas a Jenaro Lozano Aragón y Gregoria Bermejo Lavara por la desaparición en acto de guerra de su hijo Lucio Lozano Bermejo de oficio cabo.

03/01/1913:

Se reintegran 1000 pesetas a Francisco Sandoval Fontes, reemplazo de 1912, por reducción del tiempo de servicio en filas.

2/03/1897:

Procedente de Cuba desembarca en Cadiz el soldado de tropa de infantería Isidro Ortiz  Huerta, enfermo, destinado al Regimiento de Mallorca número 13.

14/04/1907:

Epifanio Romero Muñiz, hijo de Manuel y de Josefa, se le deben 113 pesetas, pertenecía al Regimiento Isabel la Católica número 54 (ultramar)

30/10/1906:

El Rey concede el retiro al carabinero con destino en Alicante, por causar baja, Julian Carretero Vara.

15/08/1931:

Pasa a la situación de retiro con haberes de suboficial, Victoriano Culebras Carretero.

17/04/1892:

Cobro de libramiento del soldado Mariano Requena Aragó con destino al Regimiento de cazadores Alba de Tormes (Valencia)

18/10/1896:

Procedente de Cuba, para continuar servicio, desembarca en Santander, Constantino Caballero Redondo que estaba destinado en el Regimiento del Rey número 1

Recopilación realizada por José Vicente Navarro Rubio

POESÍA: SOBRE UN PREGÓN, EL DE ESTE AÑO EN PINAREJO



Todo es historia
aunque solo quede la que escriben ellos,
ellos son los que dominan
y los que imponen sus criterios,
los que aprietan el cinto,
los que juegan con tus derechos.
Hablo de ellos de los que se denominan como "Don", de  los Duques, Marqueses, Condes, Excelentísimos
y con ellos
toda esa cohorte de monosabios
que se creen con derecho
a prohibir y mandar sin ningún tipo de respeto.
Mira por donde
esta España construida sobre cimientos que defienden básicos derechos
vuelve a estar como en sus comienzos
debatiendo sobre que hacer para restaurar todo aquello que con tanto ahínco
clavamos como estacas sobre el suelo.
En ello está ese pregón
en Pinarejo
de mi amigo y escritor
Paco Arenas, que en su pueblo,
se sintió por unos momentos,
ya sin nervios,
como ese ruiseñor
que lanza sus trinos desde las ramas de los olmos de un encaño de ensueño
sobre los labriegos,
aquellos que marchaban con la escarcha hasta el cuello
camino de los campos donde con muchos rezos
sacar a la tierra su alimento.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

domingo, 13 de septiembre de 2015

POESÍA: PARA CUANDO LLOVÍA EN UNA YA PASADA TARDE

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Y llovía
con tal mala suerte
que la tarde se quedó vacía
de gente por las calles.
Cuatro gotas,
solo un instante,
ni más ni menos, así se define, el agua que cae
confundida en lo que es,
para lo que sirve y de ella se quiere.
Las palomas volaron
en ese instante
que sintieron sobre su cuerpo
algo más que el viento helando su sangre.
Fueron las copas de los árboles
las que abiertas como paraguas muy grandes
recibieron ese bautismo que los convierte en fervientes adoradores
de los días cuando nacen
entre nubes y fríos aires.
Y la tarde que truena
y la tarde que en el cielo arde
antes de que las compuertas de los pantanos donde las nubes crecen
se izaran para dejar caer el fruto de su vientre.

Autor: Jose Vte Navarro Rubio

POESÍA: PASÉ POR DELANTE DE UN PARQUE

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Pasé por delante del parque
entre acacias que crecían a sus anchas
y palomas haciendo sus necesidades
bien acomodadas
sobre las ramas
de los tupidos árboles
que con su sombra cerraban por arriba el paisaje.
En los bancos
bien sentados
se acumulaban años
de panaderos y de noches
cociendo panes,
de madres gestantes
pariendo hijos que después se van como las aguas por sus cauces,
de albañiles luciendo las paredes
y haciendo crecer con su arte las ciudades,
de viudas mordiéndose la lengua con los dientes
para no decir a los vientos del mundo
lo sufrido en sus propias carnes,
de maestros en enseñar lo que saben
y hacer crecer en sus alumnos el amor por la cultura que ellos sienten.
Pasan a velocidad constante
niños montados en bicicletas
arrastrando con coraje
sonrisas que saben a dulce de chocolate.
Ellos todos mis amigos del parque
saben que en el parque siempre late
con más fuerza el corazón del aire.

Autor de la poesía: Jose Vte. Navarro Rubio

POESIA: LA AMPLITUD DE UNA NEVERA AMERICANA

laamplitud

SEMÁFOROS EN ROJO
Las buenas historias se viven
en páginas desordenadas.
La buena vida se escribe
en labios a medio morder.
La mala suerte ha empezado
al cruzarme con tus piernas y quedarme
roto y sin tu falda en medio de Gran Vía
a media noche, desierto en mi Opel Corsa.
Nunca sabré tu nombre.
Pero no importa. Cruzaste el paso cebra
como un tiro en el estómago.
Me abrazo a los semáforos en rojo,
toco el claxon y mi coche parece gritar.

Pedro antonio Andreu López 1976, Baleares 
ESPAÑA 

Pedro Andreu (Palma, 1976) es autor de siete libros de poemas: Partida entre canallas (XII Premio Nacional de Poesía Blas de Otero. Madrid, 2001), Anatomía de un ángel hembra (Palma, 2008), A Quemarropa (bajo el pseudónimo de Travis Ortega. Palma, 2010), El frío (VII Premio Cafè Món. Palma, 2010), Alquiler a las afueras (Palma, 2014), Laura y el Sistema (Madrid, 2014) y La amplitud de una nevera americana (Madrid, 2015). Ha colaborado con relatos, poemas y reseñas literarias en diversas revistas españolas e hispanoamericanas, así como en algunas antologías. Su única novela publicada es El secadero de iguanas (I Premio Internacional de Novela Fantástica. Vitoria, 2010). Gran parte de sus obras también han sido editadas en formato electrónico (Leer-e, 2012). Tras los más diversos empleos y haber residido cerca de dos años en Sudamérica como cooperante internacional, hoy en noche ejerce de juglar en paro y se gana los panes en un centro de acogida para víctimas de violencia de género en Mallorca. Tiene un alma nómada, ridícula, y un corazón mordido de palabras.

POESÍA: LA CIUDAD DE MAFALDA



Por las ciudades caminaban los pobres
de tierras extrañas
en esos suburbios suyos,
ghettos,
en los cuales viven de espaldas
a las luces de neón
y a los escaparates
con libros de Mafalda.

Por allí se dejan ver los seres de todas las razas
con sus miedos
y esperanzas
arrastrando sus soledades
desde las primeras horas de la mañana
hasta que la noche se abalanza
sobre la ciudad donde conviven los pobres, los ricos y las hadas.
 
En los ponientes
las ciudades
se abren
como si fueran gajos de naranjas,
dulces por dentro
y por fuera ásperas
a la ciudad se asoman desde todos los puntos de una geografía lejana
sus refugiados de tierras extrañas
con sus pertenencias a cuestas
y sus familias pegadas a las faldas.

Vienen y lo hacen tan llenos de esperanzas
que darían todo lo que tienen
por vivir en esas cómodas casas
que crecen como los ramales de la Vía Apia
allí donde las ciudades sobre el cielo se alzan.

Ellos llenan los espacios, diaspora,
sin más armas
que sus manos vacías
y esas ganas
de rehacer una nueva vida lejos de todo aquello que les hiela el alma .

Cae la lluvia
y resbala
de hoja en hoja y de cara en cara
mientras  corren en bandadas
pobres gentes que huyen de lugares donde el odio
es tan grande que mata.

Autor: Jose Vte Navarro Rubio

POESÍA: LA SIESTA EN LA HORA ROMANA DENOMINADA SEXTA

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Atentos con la siesta.
Hay que ir a por ella
y si la encuentras
ya sabes
nada de penas,
cogerla,
y abrazaros a ella
con fuerza,
pues es buena compañera,
dulce en apariencia,
no reniega,
no te pide cuentas,
no se enfada
y si la cortejas
se deja
besar con fuerza,
y amar allí donde te apetezca.
A si se llama
esa hora solar y romana sexta,
entre candelas
que sirve
para hundirse
en esas sombras, pereza,
que cae a las 2 de la tarde a poco que te quedes tumbado al raso y a la serena

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

 CÓMPUTO DE LAS HORAS EN LA ANTIGUA ROMA



Los días entre los romanos no tenían 24 horas como los nuestros. 
La duración del día y la noche estaba determinada por la salida y la puesta de sol. 
El día (nuestras 24h.) estaba dividido en dos partes: las horas de sol, divididas en doce "horae" (sing. hora) , y las horas de oscuridad, divididas en cuatro "vigiliae" (sing. vigilia). Para dividir las horas, utilizaban relojes de sol, y más raramente relojes de agua
Las horas de sol eran de duración variable según la época del año y se expresaban con números ordinales: hora prima, hora secunda, hora tertia...hora undecima y hora duodecima. 
La hora sexta marcaba el mediodía y de ella procede la palabra siesta. 
En esta época del año, primavera, la hora prima sería un poco más tarde de las 7h. de la mañana y la hora duodecima más o menos a las 9h. de la noche (21h.).

POESÍA: DE LO QUE UN GOBIERNO CUENTA ACERCA DE ESOS REFUGIADOS TRATADOS COMO BESTIAS

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Aceleren las entregas
y no vengan con sus miserias,
justificaciones que no se sostienen
por mucho que se envuelvan
de buenas intenciones y de datos repetidos,en diferentes entregas.
Lo primero es salvar a esos seres humanos que hasta Europa llegan
pues de no actuar a tiempo
el reparto será de esquelas
de esas que llenan los diarios de todas las prensas.
Es la historia la que nos recuerda
que los grandes holocaustos se gestan
por culpa de esas disculpas que de ser verdaderas
solo caben en cabezas
que solo saben marear con tal de justificar su pereza.


Autor: Jose Vte. Navarro Rubio

POESÍA: DE ESTAS Y AQUELLAS GUERRAS

             
 REFUGIADOS ESPAÑOLES                             REFUGIADOS SIRIOS

Cara y cruz
de una maldita guerra
esa fue la nuestra,
la vivimos en España en tiempos de cólera.
La historia está llena
de todo eso que nos causa tristezas,
las de entonces
en labios de una niña ahora abuela
que llora ante lo que ve en imágenes que le recuerdan
a aquella otra época
en que salió de España
en situaciones muy parecidas e idénticas
a las que ahora de revote nos llegan
a través de las antenas.
Debemos ser cabecera,
cojín, colchón,
y no estera
a la que de vez en cuando
para quitar el polvo se le pega con fuerza.
No perdamos el recuerdo,
no nos olvidemos de  nuestra tragedia
consecuencia de una pérfida guerra
con cientos de miles de muertos
todos con sangre de esa que si se cultiva pertenece a la misma esfera
de las temibles guerras,
ninguna de ellas buena.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

POESÍA: TRATAR A LOS REFUGIADOS COMO SI FUERAN NÚMEROS ES UNA DESVERGÜENZA

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Son un número
entero
con la certeza
de que ni uno más
de esta terna
pasará por las fronteras.
Se mide el dolor
bajo la esfera
de los repartos
como si los seres humanos fueran
sacos de patatas o de malas hierbas.
Se juega
con el dolor de los seres humanos.
Se dice salvando las apariencias
que todo se hace con el fin de la acogida sea más perfecta.
No se pueden cerrar las fronteras
a esos seres que llegan
aterrorizados por lo que detrás de ellos dejan
ya la muerte rodándoles cerca.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

POESÍA: LAS NUEVAS TECNOLOGIAS

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Me despierta el canto de un gallo,
de esta nueva era,
maquina toda ella
que se pasa la noche adorando a su luna de madera
con golpes y silbidos
que parecen proceder de otras épocas
en que maquinas de vapor se arrastraban por una geografía llena
de raíles, puentes y túneles, todo una epopeya.
Estas maquinas son la nueva quimera
que sujeta a los seres humanos a la tierra
por el tiempo que sea.
Son tan perfectas que sus estruendos se manejan
dentro de una esfera
donde el tiempo se contabiliza de tal manera
que todo llega
con una precisión que para si quisieran
los relojes de pared que presiden las torres de las iglesias.
Duerme mi padre
y en sus ausencias
esa maquina me recuerda
que en la otra habitación alguien respira gracias a su eficiencia.

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio

POESÍA: EL TALLO SOBRE LA TIERRA

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Fue la fuerza,
la del tallo,
ella,
la semilla
rota y ebria
de luces
tan externas
que la tierra
se rompe,
agrieta
y sale de ella
el tallo verde
emergente a su guerra
de entre los terrones de tierra

Autor: Jose Vicente Navarro Rubio
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