A contraluz
la luz esgrime
la sonata rota
de una orquesta en un parque,
en una primavera más
sin motivo aparente
volando por los aires
dos notas, una DO y una RE,
que arremeten
contra una ventana convertida en trinchera
y a la otra parte
el sonido estridente
que desprende un televisor
que no deja de trasmitir
la luz esgrime
la sonata rota
de una orquesta en un parque,
en una primavera más
sin motivo aparente
volando por los aires
dos notas, una DO y una RE,
que arremeten
contra una ventana convertida en trinchera
y a la otra parte
el sonido estridente
que desprende un televisor
que no deja de trasmitir
lo que se le pide al instante.
Autor: José Vicente Navarro Rubio
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