Tu corazón habitas
donde los sentimientos tienen su morada
cerca del alma,
y tan de tanto vales
por tu maquinaria
siempre latiendo y en marcha.
Corazón de corazones
así son los amores
como margaritas y rosas encarnadas
marchitas por la noche
y relucientes de buena mañana.
Amores perdidos y aventuras pasadas
en un portal, en un cine, en la playa
allí donde las piedras no hablan.
Prisionero en un castillo miro por la ventana
como decae el día
y como llega la noche con su sonrisa quebrada.
Cantares de un juglar en una campiña
de verde toda ella tapizada
donde las mozas lavan las ropas
y las viudas enjuagan las lágrimas
mientras se oye una canción que dice:
Tu eres serrana
verde lirio
de sonrisa apagada
que vienes al río
a lavar tu alma
con agua fresca,
con agua clara.
Vente serrana conmigo,
vente que me haces falta
pues de tanto andar por los caminos
y de tanto cantar al alba
tengo el corazón roto
y la garganta irritada.
Autor: José Vte. Navarro Rubio
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