POESIA: CON MOTIVO DE DOS PÁJAROS QUE COTRAATACAN

                  I
Si hablamos de contraatacar
se puede hacer por tierra, aire o mar
pero en este caso que nos atañe
de una forma tan especial
el desembarco es musical
por parte de dos pájaros vestidos de negro
con bombín ajustada al hueso occipital
que cantan que dan gusto
aunque en eso de la edad
son de mi quinta y no les digo nada más.

Serrat y Sabina,
cada uno en su lugar,
uno, Joaquín Sabina,
de Ubeda en Jaen,
le canta a todo lo que pilla
con total naturalidad
y el otro Joan Manuel Serrat,
catalán de toda la vida,
ya lo vino a demostrar
en un eurofestival
en el que se negó a cantar
en idioma que no fuera el de su Cataluña natal.

Estos dos pájaros,
Dios les de alas para que puedan continuar
su derrotero musical
entre aplausos y éxitos, en general,
nos vienen a demostrar
que en España se puede cohabitar
sin necesidad de agitar
el asta de las banderas para golpear

Bienvenidos sean 
al panorama musical nacional
este dúo de cantautores
tan original,
uno y otro poseído
de un duende especial
que los hace únicos
en eso de cantar
y ganarse al público en general

              II
Llevaba amores prendidos
en la ronca garganta
abierta por el vino
y quemada por el fuego cosumido
de un cigarro negro
que le hacia olvidar
de todos sus amores
uno solo que le llevó por caminos
que no volvería a andar.

De puerto en puerto
como buen marino
cargó su saco de suspiros
que arrancaba a las mujeres
en las cuales ponía el ojo
sin errar el tiro
y de puerto en puerto
la voz se le iba
de trino en trino
y de puerta en puerta
cuando la luna se ocultaba entre nubes
de color negro y de tono subido.

¡Ay marino!
con ojales de plata,
en un traje blanco
con gotas de alcohol
de 100 burdeles
en su destino
y besos con olor a agua de mar enfurecido
en un clavel prendido
en la oreja izquierda
para no perder el juicio.

Amor de una tarde
se lo llevó el destino
hacia otros mares
y puertos malditos
con burdeles de todo tipo
donde un marino
sueña con llegar a su destino
para decirle a su amada
lo mucho que en la tardanza la quiso.

             III
Aguantar el tipo viene a ser
como cantar y beber
para no dormirse café
a la hora que sea
con tal de romper
la monotonía tremenda
que a veces inunda nuestro ser.

Eso viene a hacer la orquesta del Titanic
en esos días de triste amanecer
en los que todos los músicos a la vez
salen al salón de baile para ofrecer
su última balada
en las simas abismales
donde viene a yacer
un transatlántico por culpa de un iceberg.

Melodías de ayer y hoy
conjugadas con sales marinas,
y aleteos de peces que se asoman a ver
como los picos de las faldas
de bellas mujeres vestidas hasta los pies
se mueven al compás de un vals vienés

Autor de las poesías: José Vte. Navarro Rubio