Dicen de Barcenas
que era un borde
con mucha cara
porque repartía con mucha desgana
el dinero que metía en sobres y cajas
que le servía para templar gaitas
Contaba este hombre,
con ojos de águila,
el dinero que acarreaba,
mientras en España
el paro aumentaba
y Rajoy anunciaba
austeridades a ultranza.
Desde Génovas,
ya las gaviotas
en desvandada,
temen más a Barcenas
que a una tormenta seca
en lo alto de una montaña
Grandes han sido
las andanzas
del borde de Bárcenas,
siempre con la mochila
a la espalda,
con un pie en Suiza
y otro en España,
esquía que te esquía,
carda que te carda,
los billetes de quinientos euros,
como si fueran lana. Autor de la poesía:
José Vicente Navarro Rubio
No hay comentarios :
Publicar un comentario