Tratar a los refugiados como una cuota
me suena a paradoja
en un País que en su día necesitó
de la ayuda que ahora se niega a quienes huyen de las guerras,
hambre y dolor.
Este gobierno
tan dado a poner a la religión
por encima de todo aquello que representa el buen gobierno de una nación
en el tema de tener compasión
muestra una dureza impropia de los buenos hijos de Dios
Como gallego
y natural de un pueblo
con grandes indices de emigración
Rajoy debería mostrar
algo más de atención
en todo aquello que otros pueblos nos dieron,
pero no,
este gobierno capitaneado
por dicho señor
muestra su peor cara
y es que no tiene, al parecer, otra mejor.
Autor: Jose Vicente Navarro Rubio
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