¡Cojones con lo nuestro!
¿que hay de aquello?
Se lo digo a usted
que demostró tanto celo
en quitar una paga extraordinaria
y la devuelve ahora a contrapelo
cuando en el horizonte cercano
las trompetas rugiendo sobre los cielos
se anuncian elecciones
que devolverán al pueblo
otro posible gobierno,
diferente al suyo, en ello,
usted, Rajoy, demuestra sus muchos miedos.
¿Cómo puede
devover lo que se llevó,
por imperativos legales,
hasta un cementerio
para corregir las deudas de un país deshecho por el fraude desde Europa descubierto?
Lo suyo es oportunismo barato,
lo suyo es como aquellos ungüentos
que los charlatanes vendían en las ferias de los pueblos
que decían que servían para hacer crecer el pelo.
A mi, no me de nada
de lo que me quitó,
pues en ello
nadie me compra
y tenga por cierto
que a nadie engaña, por mucho que en ello,
ponga ese celo,
que un tal Montoro,
Ministro de su gobierno,
ha puesto
para decir que los funcionarios recibiremos
un veinticinco por ciento
de aquella paga extraordinaria que se llevó el viento.
No quiero
nada de lo suyo
y dedique esos dineros
a corregir el déficit que desde Europa nos anuncian desde hace tiempo.
Me despido
para lo malo y para lo bueno
con una sentencia de nuestros abuelos:
¡en el reino de los ciegos
el rey es el tuerto!
Autor: Jose Vicente Navarro Rubio
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