Esta es una entrada sin título
será por eso
que va y mucho conmigo.
Recaí en un pueblo
en un invierno crudo
y por mi dio un médico
el muy ducho
menos lo que da este gobierno
a quienes pasan hambre y frío.
Fue lo mío
una lucha
desde ya muy pequeñito
contra ese destino
tan fuerte
como la palabra de Dios
en boca de quienes viven de su oficio
en grandes palacios de mármol
y sobre el pecho un crucifijo
de oro macizo
como si la palabra de Dios
tuviera derechos adquiridos.
Así es
y así lo digo
que no hay nada más bonito
que haber nacido
para ser, ojo con lo escrito,
al cabo de tantos años
el mismo,
yo con lo mío,
tu con lo suyo,
y otros,
que jeta las tías y tíos,
pringados en asuntos sucios
hasta el culo.
Autor: José Vte. Navarro Rubio
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