Un cortejo es este de palabras
en un tren que circula,
que levanta los paisajes,
que es su rutina
el atravesar esa raya fina
entre el arco iris
y una lluvia repentina
mientras leemos en la prensa
noticias sobre la fragilidad de la mujer
cuando sus verdugos las martirizan.
Aquí descansa este poema,
que va entre vías,
sujeto activo se sabe
aunque la pasividad del día
es el peor de los males,
y a pesar de ello
no tengo dudas
la humanidad nació
con el estigma encima
y no hay quien pueda
arrancar una sonrisa
al arrogante monstruo,
macho cabrío,
para cuando se despierta su furia
Autor: José Vicente Navarro Rubio
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