Camina y camina,
caminando van,
se acercan los Reyes,
vienen dando vueltas
sin parar. al mismo lugar.
Los andares de sus majestades
año tras ano
no dejan de cambiar,
tantra guerra
y tanta falta de humanidad
convierten la Navidad
en algo parecido
a una especie de cenagal
para el que hay que ir preparados
de todo menos de turrón,
zambombas y champán.
El portal cerca,
los Reyes de sus monturas
se acaban de bajar,
van provistos de un arsenal
de buenas voluntades
con las que un ciprés adornar.
Ahora ya han entrado
allí donde un ángel sin rechistar
mira con catalejos
hacia donde se ven destellos
que auguran un mal final
en esta historia del Medio Oriente
que se repite al igual
que una gota de agua
que no deja de resbalar.
Autor: José Vicente Navarro Rubio
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