Un castillo de naipes
y en ellos
un fantasma
con sus carceleros,
una dama esperando el regreso
de su querido y amado
soldado al servicio del pueblo.
Un halcón volando
sin saberlo
por allí donde se rompen los deseos
y es un soplo cualquiera
puede conseguir por cierto
que se derrumbe el castillo
y mueran los bonitos pensamientos.
Autor: José Vicente Navarro Rubio
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