Del café queda su aroma,,
queda el sorbo,
queda el saber
que mañana será otro día
y se podrá en él
volver,
todo es eso
de volver y volver,
andar lo caminado,
volver y volver,
al ritmo del poema
en que se saborea
ese último trago de café.
Autor: José Vicente Navarro Rubio
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.