Una cuchara y una bala,
cruel realidad,
este parece ser el día a día
de muchos habitantes
del cuerno de África
que malviven y mueren
en ese territorio de menguadas tristezas
Sobre un mapa
haciendo trazas con líneas rectas
se realizó la divisoria de países
en esa parte del mundo
y allí dentro de esas líneas
llamadas fronteras de Somalia, Kenia y Etiopia
mueren los nobles pastores, mujeres e hijos,
de las regiones áridas,
sin tener tiempo de llegar
a los verdes pastizales
a los verdes pastizales
donde saciar la sed sus rebaños
de camellos, cabras y ovejas,
ni a los estériles pozos
de los cuales extraer
ese preciado liquido llamado agua,
que nosotros en occidente desaprovechamos
de una forma tan inconsciente.
Pastores de una misma etnia y habla
se reparten anónimamente por estos países
gracias a las felices ocurrencias
de las potencias coloniales
que un día debieron pensar,
ya perdidos sus dominios:
ya perdidos sus dominios:
¡Tomar ésta vuestra patria
y disfrutar africanos de la Commonwealth
de esos inhóspitos territorios de vuestros antepasados
a los que nosotros sometimos y ahora hemos dividido!
Cuatro son las grandes plagas
que se alzan sobre este territorio,
una gran tasa de natalidad, el cambio climático,
la gran pobreza de la región
y la creciente inestabilidad política,
y frente a ello surgen felices ideas
y apoyos de manos amigas
en la forma de aldeas del milenio
y bancos de desarrollo
para estos pobres de solemnidad
de este mundo del siglo XXI.
de este mundo del siglo XXI.
José Vte. Navarro Rubio
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.