Acompaño este apartado con una poesía escrita para el momento:
Guillermo Osorio no es un poeta de este mundo
quizás lo fue en algún momento
y en ello
debió de andar
a tiro de cañón de una República
y de una posguerra
al encuentro de algún cantar quebrado
en su encuentro con el viento.
Debió oír deshojar el silencio en alguna rama
y eso le llevo a la búsqueda de una poesía
con la que cantar
en la mañana
y irse a la cama en esos días
en que alguien grita:
¡Que se nos mueran de una vez los muertos!
que ya iremos a verlos,
como pueden comprobar
todo parece un cante hondo de las minas
o el rudo estertor de un alma sola
Autor: José Vte. Navarro Rubio
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