Los libros, la poesía y el frío,
la noches de insomnio fabricando poemas
destruyendo palabras que no riman,
matando las penas
a golpe de machetes entre gritos,
ausencias,
en esa noche de silencios limpios,
de amigos que te ayudan a salir de la pobreza.
En espera de un nuevo día
cierras la carpeta,
te encaminas hacia la misma acera,
ves en la calle
tus carteles anunciando libros a peseta
entre fríos que pasan
sin detenerse a preguntarte
si hay una obra nueva
al tiempo que llegan
funcionarios de un ministerio del cual tu has cogido su fachada
para montar tu tienda.
Las vendedoras de flores maletillas, limpiabotas,
ausencias,
de compradores que se vengan
hasta la galería del esperpento
con la mirada puesta
en una de esa portadas en que se anuncia Buscarini
como si fuera una estrella.
Se apagan las luces
en el teatro de la comedia
y los actores y actrices salen
para recibir al público que los vitorea
no sabemos el por qué -quizás fue por pena.
Autor: José Vte. Navarro Rubio
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