Puede ser que el verso
que tu pides
sea al mismo tiempo mi verso.
Podría ser que el verso
que nos ayuda a ser sinceros
solo sea,
es cuestión de tiempo,
suave por fuera y áspero por dentro
como los membrillos de mi pueblo.
El verso que quieres
es tan perverso
que solo sabe del amor aquello
que alguien trasmite con su cerebro
a un trozo de papel, tan frío, como un helado durmiendo
en un congelador bajo cero grado centígrado.
Autor: Jose Vte. Navarro Rubio
No hay comentarios :
Publicar un comentario