Estigma,
hundió la mirada,
se sintió fiera herida,
de los suyos sabía poco, se le juntaban las rimas,
de aquel poema muerto no salió nada,
ni fumata, ni aventuras,
la piel tan sufrida
y las vísceras en su interior podridas.
Autor: José Vte. Navarro Rubio
No hay comentarios :
Publicar un comentario