Nos devoró,
por ahí queda
este año que se marcha;
las sombras que se dejan ir;
el mar que nos deslumbró
con sus lentas melodías,
en esas horas nocturnas,
ya las playas esperando la llegada
del oleaje
y quien mira observando
el ruido de fondo
que no es más música
que la que sale
de allí donde solo se espera
compañía con que hacer
todo más llevadero.
Se va un año
al que recriminar
por lo que no hizo,
por lo mucho que se ajustó a su guion
de dios intocable,
por ser guerrero y dar batalla,
por no conseguir ese fin envidiable
que es la paz
allí donde las guerras son diferentes
a la felicidad
que de normal se persigue
desde los orígenes
de esta nuestra humanidad
tan en el origen
de todos los males conocidos
Autor: José Vicente Navarro Rubio
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