POESÍA: POLLO PINAREJERO AL ESTILO LOS MACISCOS

               
En esto de la historia de Pinarejo
también tenemos que hablar
de aquellas recetas que nuestras abuelas
venían a preparar.

Esta por ejemplo
tiene poco que empollar
y por si no fuera suficiente
yo se la vendré a explicar.

Para esto buen amigo
cierra los ojos ya
y piensa que subido en un borriquillo
vienes cansado de trabajar
y a lo lejos ves el pueblo
y por encima de las chimeneas salir
un humillo especial
que indica
que la olla
en el rescoldo de la lumbre está ya
preparada para poner en la mesa
y de un zarpazo liquidar.

Con esto que acabamos de decir
y un poco de aire
que con una fuelles vamos a dar
la comida seguro que será
de nuestro agrado
y nos servirá para recordar
aquel pueblo con su virgen en un altar
que a la memoria me viene
y me hace cavilar.

Ahora viene la receta
de esa comida especial
que ese buen pinarejero
está cerca ya de degustar.

Sin más,
vayamos en nuestro empeño
de explicar
como preparar
lo que yo he venido a llamar
pollo con tomate y huevos de corral.

Mandil a la cintura
y cuchillo presto para atacar
comienzo
era hora ya
de dejar de dar la lata
y pensar
que en robar el tiempo a nadie
está
la verdadera felicidad.

Poner a hervir un pollo
en agua,
claro está,
y después de bien hervido
dejar enfriar,
pues de lo contrario te quemarás.

Ahora viene la faena
que da
por aquí y por allá
y que consiste en desmenuzar
y separar
la carne del esqueleto
que le sirvió para piar
y una vez la carne desmenuzada
ponerla a freír
10 minutos nada más
y echar tomate triturado
como guiso especial
y ya casi a punto de sacar
dejar caer tres huevos
y menear
todo el condimento con gracia y agilidad
y dejar reposar.

Está es la receta que atiné a copiar
de un viejo papel
que sepa Dios por donde estará
pues en la cámaralo ví
y veas tu porque asunto particular
se fue allí donde el papel se suele reciclar.

No lo duden
que es verdad
que por aquel siglo XVIII
se solía en Pinarejo cenar
con este marmolejo que yo les he venido a explicar.

Total con 4 euros
nada más
se pone una familia las botas
y le da
hasta para engordar.

Autor: José Vte. navarro Rubio