Aquí me quedo, aquí presente y eterno,
casi melodía casi ritmo,
casi poesía,
quizás no sea nada,
solo un influjo de mi ser
convertido
en eso que se llama
un extraño artilugio.
Me he apretado una tuerca
y es que se me había salido un tornillo,
ando mascando ritmos
de guitarras y pitos,
me gustan los aceites compactos,
vivo subido en lo alto de un pino,
vigilo a los cometas,
me han dicho que quizás caiga
sobre la tierra un meteorito.
La estación a la que pertenezco
solo atiende a ritmos de tambores
de esos que viajan por el Olimpo,
me saluda Zeus,
creo que se ha hecho mi amigo,
por allí veo a pseudo-poetas
recibiendo entre alivios
lecciones de un libro muy antiguo,
la "m" con la "a", "ma",
y aquello de Pinto Pinto Gorgorito,
aviso,
se ha quemado un monte
y la descarga de agua ha caído
sobre un pobre hombre
que por allí andaba a lo suyo,
descanse en paz,
lo siento amigo,
que culpas tenías tu
que el cielo haya sido contigo tan desagradecido.
No hay comentarios :
Publicar un comentario