Sin saberlo nos sentimos
un día y otro, tantas veces,
sujetos indeterminados,
entre adverbios
y resto de terminaciones,
así miramos el pasado
mientras vivimos en el presente,
a la espera del futuro estamos
y lo hacemos con ese singular carácter
de quienes se sienten abatidos
por el rumor creciente del oleaje
que viene de un mar enfurecido
que ha visto crecer sus corrientes,
ya sus playas desiertas
convertidas ellas en lugares de almacenaje
de todo lo que llegaba por un río
que no sabía que hacer
con aquello que llevaba
en la superficie de sus aguas
tan ya lodazales.
Autor: José Vicente Navarro Rubio
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