No busco otra cosa
-nada más-
en este día a día
-que me dieron a mamar-
tan singular.
Soy materia
-de origen animal-
con destellos
de poeta
que aprendió a caminar
sin intentar pisar
a los demás.
Ahora me dicen
que debo cambiar
-menos mal
que mi vida transcurre
como un tranquilo manantial
por derroteros diferentes
y no tengo que usar
de otra filosofía que no sea
el pensar-
Me dicen ahora
para no variar
que hay que ser competitivos
y demostrar
que eres bueno para trabajar
y que debes callar
en nombre de esa democracia
en la que algunos se vienen a orinar
sin necesidad de usar
del consabido retrete u orinal.
Querido Buscarini
me vengo ante ti
a confesar
por que eres el único ser etéreo
-oráculo de manual-
en el que puedo confiar
después de ver
como este Estado ramblón
nos viene a desplumar
y como todo aquello
por lo que luchamos
se desmorona sin parar
a poco que abras las páginas de un diario
y te de por investigar.
Supongo que allí
por donde sueles pasear
entre puestos de flores
y tenderetes de libros de usar y tirar
estés bien
y te hayas acostumbrado ya
a no ser diferente
y querer demostrar
que hay otras formas
mediante las cuales se puede alcanzar la felicidad.
No creo Buscarini
eso que me dicen
que de la cabeza estabas mal.
Creo por lo que he leído
y se viene a contar
que el mundo de los locos
estaba fuera
de donde a ti te vinieron a instalar
con testamento o sin él
-da igual-
la buena razón es
que aires nuevos
se instalaron en esa patria tan singular
por la que tu navegastes
y te viniste a ahogar
entre sorbos de sangre
y una cierta diarrea mental
que en su momento no se supo aprovechar
Me voy Buscarini,
es la hora de pasear
con perro de collar
y como se dice en mi pueblo
quede usted con Dios.....nada menos y nada más
Autor. José Vte. navarro Rubio
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